El Banco de Tapones del Baixo Miño, Banta, inició hace un par de meses su 11ª campaña destinada a ayudar a costear el tratamiento de Jorge, un niño de 10 años de Oleiros, y de Brais Gil, un pequeño de 12 años vecino de Moaña.

El moañés tiene parálisis cerebral, artritis reumatoide e intolerancia a muchos alimentos, entre otros problemas. Desde Banta aspiran a recaudar 3.000 euros para costear los tratamientos de fisioterapias del pequeño y también para la alimentación, pues necesita alimentos especiales en muchos casos.

En estos dos meses el banco de tapones ha recaudado la mitad de las 42 toneladas de plástico que necesita para costear estos tratamientos. "El tiempo corre y urge llegar a las 42 toneladas para los alimentos de Brais Gil y también porque hay más niños con problemas esperando por nuestra ayuda", destacaba ayer Manuel Pardo, el presidente de este banco.