El ejecutivo municipal de Moaña volvió a requerir la participación de los agentes de la Policía Local para evitar que el grupo de vecinos que se concentra cada mañana para exigir un paseo de Seara de 6 metros de ancho y por el borde litoral reventasen la celebración de las dos comisiones informativas de ayer. Al igual que ocurrió en el pleno de la pasada semana, agentes municipales solicitaron a los asistentes que se identificasen con el DNI, antes de acceder al salón de plenos.
Se les avisó de que, si impedían la celebración de la sesión, podrían ser expulsados del salón de plenos y se exponían a sanciones económicas. Si en el pleno de la última semana los vecinos agrupados en la Plataforma Beiramar optaron por abandonar el patio de butacas tras este aviso de la Policía, ayer decidieron continuar y solicitaron varios turnos de palabra. La estrategia pasó a ser entorpecer la comisión mediante la toma de la palabra por parte de las más de 20 personas que se citaron en la sesión. Eso sí, no fue necesaria una intervención policial y finalmente se pudieron celebrar las dos comisiones.
Los concentrados optaron por no interrumpir la sesión cantando, como venían haciendo en las últimas semanas.
La primera comisión informativa fue sobre Urbanismo y Promoción Económica y estuvo presidida por Odilo Barreiro y Coral Ríos. La segunda fue la comisión de Obras e Cultura, que presidió Salvador Meira.
Asistieron también los ediles del PP, Antonio Sánchez, Rosa Solla y Estela Santomé. En el último pleno los populares habían declinado entrar al limitarse el aforo del público.
