La concejala de Servizos Sociais de Moaña, María Ortega, trabaja desde hace varios meses en la redacción de la ordenanza que regule las ayudas de emergencia social. A través de este reglamento, que podría aprobarse en el pleno del próximo 28 de abril, Moaña podrá colaborar de forma estable y mediante una aportación económica con el comedor social Hermano Donaire, que abrió sus puertas el pasado otoño. La concejala explica esta situación después de que el promotor de este comedor, Manuel Álvarez, asegurase que iba a cerrar el servicio por la falta de subvención pública para su mantenimiento. Ante la ausencia de ordenanza, las ayudas de emergencia social se están concediendo hasta ahora en base a los informes de los técnicos de este departamento.
Ortega explica que el ejecutivo local espera que no se cierre el comedor, "sobre todo porque rompería as expectativas das personas ás que está axudando". Indica, pese a todo, que la nueva ordenanza entraría igual en vigor y pide a los usuarios del comedor que no tengan relación con los técnicos de Servizos Sociais, "que acudan ao Concello ou chamen, porque coñecer a súa situación é a única forma que temos de artellar os mecanismos para axudalos".
Si se aprueba la ordenanza Moaña puede convertirse en el primer Concello que ayuda económicamente a un comedor social en la comarca. El edil de Servizos Sociais de Cangas, Tomás Hermelo, recuerda que de momento la ayuda del Concello cangués al comedor de esta villa se centra en colaborar en campañas de recogida de alimentos y tramitar ayudas con la Xunta y la Diputación, aunque no descarta recurrir también a una subvención directa en el futuro.
El promotor del comedor de Moaña criticó el fin de semana que la ayuda pedida al Concello lleve meses sin resolverse. María Ortega, por su parte, repasa todo el proceso seguido desde que el comedor abrió sus puertas en octubre en las instalaciones del restaurante Casa Mariano. Entonces los promotores del comedor no estaban constituidos en asociación. "Colaboramos con eles dende o Concello para regularizar a situación, porque a Administración non pode dar cartos sen esixir uns requisitos", apunta. El pasado 30 de diciembre lograron que el comedor Hermano Donaire se inscribiese en el registro de entidades prestadoras de servicios sociales de la Xunta de Galicia. Pero no fue hasta el pasado 18 de febrero cuando pasó a estar registrado como asociación en el Concello.
"Mentres non puideramos aportar cartos ao comedor propuxemos aos responsables colaborar aportando comida ou produtos de limpeza, pero non o aceptaron", indica María Ortega, quien atribuye la frustración del promotor del comedor al hecho de que abriese el servicio antes de gestionar su regularización.
Ortega defiende que en las últimas semanas también se comprometieron a costear la factura del gas. "Pedímoslle que nos enviase a factura e os técnicos redactarían un informe para poder abonala. Pero nunca nos chegou", recuerda.
Desde el comedor de Cangas Ángela Rodas, de la Asociación de Caridad Santiago Apóstol lamentó ayer el riesgo de que cierre el comedor social moañés. Aseguró que una salida podría ser mantener una reunión entre los dos servicios y los tres concellos de la comarca para tratar de salvar la situación.
De todas formas, Ángela Rodas recuerda lo que tardaron en poner en marcha el comedor de Cangas, hasta tener todo regularizado y poder acceder a ayudas de las Administraciones para poner en marcha el servicio.
12.000 euros
Moaña aumentó en sus presupuestos las partidas de emergencia social. Este año el Concello recoge 15.000 euros para las ayudas directas en materia de alimentos, juguetes o comedor infantil en verano para las familias con necesidades. Por otro lado, reservó una partida de 12.000 euros para subvencionar entidades de emergencia social. La concejala quiere dejar claro, de todas formas, que el comedor no se puede llevar toda esta partida, y que la cuantía, una vez aprobada la ordenanza, dependerá del número de usuarios reales.
"La factura que nos presentaron por regisro a finales de febrero ascendía a 6.000 euros", apunta. Insiste en que todas las reuniones con el promotor de Comedor está documentadas y que desde que abrió sus puertas "lle dixemos que era importante que acadase patrocinios de empresas de Moaña ou acordos con suministradores", para que el servicio no dependa exclusivamente de ayudas públicas.
