El alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos, mantiene hoy una reunión con una empresa interesada en realizar la anunciada auditoría de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) del Concello de Cangas para solventar las anomalías detectadas por el Tribunal de Cuentas, en lo que se refiere a irregularidades en las gratificaciones y productividad de la plantilla.

Ya se sabe que la intención del alcalde y de todo el gobierno municipal es que el citado trabajo lo realice una universidad, de hecho ya hubo contactos con varias, pero el regidor quiso escuchar lo que puede ofrecer una empresa privada en este ámbito. Xosé Manuel Pazos quiere ajustarse a lo que marca la ley, que mantiene que el complemento de productividad debe estar destinado a retribuir el especial rendimiento, la actividad extraordinaria y el interés e iniciativa con el que el funcionario desempeña su trabajo. En cuanto a las gratificaciones, el Tribunal de Cuentas sostiene que en ningún caso pueden ser fijas en cuantía ni periódicas en su devengo, sino que tendrá que responder a servicios extraordinarios realizados fuera de la jornada laboral de trabajo.

Pazos quiere máxima transparencia, organizar mejor el trabajo, atención a la carga de trabajo que tiene cada departamento, pero sin que nadie pierda los derechos adquiridos y, desde luego, sin que existan despidos. Las conversaciones con los sindicatos representados en la junta de personal y en el comité de empresa son continuas, con la intención de sacar este proyecto lo más rápido y consensuado posible.

Cambios en departamentos

Por otra parte, manifestar que se están produciendo cambios en las dependencias municipales. La interventora deja esta semana su cargo en Cangas para ejercerlo en Vilanova. Se especuló con la posibilidad de compatibilizar los dos municipios, pero se cayó en la cuenta de que Cangas necesita un interventor con dedicación exclusiva. Su puesto lo ocupará el actual interventor del Concello de Bueu, que ya estuvo destinado en Cangas hace unos años como tesorero. Durante un par de meses tendrá que dividirse entre los dos concellos, pero después ya tendrá destino definitivo en Cangas. En estos momentos, Xosé Manuel Pazos ya firmó el cese de la interventora y su puesto lo ocupa un funcionario de forma provisional. También se esperan movimientos en el departamento de Urbanismo, del Concello de Cangas, al jubilarse el jefe de negociado, Jesús Rodal Sotelo, uno de los trabajadores municipales más apreciados por los cangueses. Ahora se busca su relevo, aunque aquí hay una jefa de departamento de Urbanismo.