El otro morracense que viajó a Bruselas como parte de la Plataforma pola Defensa da Sanidade Pública es el cangués José Penelas. Ayer, después de tres días recuperando la normalidad en casa, todavía recordaba lo ocurrido. "As nosas familias tiñan o medo metido no corpo despois de ler as noticias. Foi unha traxedia horrorosa", reflexiona.

Sin embargo, asegura que volvería a Bruselas con el mismo objetivo, que fue presentar su denuncia contra la concesión del Hospital Álvaro Cunqueiro a la eurodiputada de Podemos Tania González, así como a asistentes parlamentarios de otros grupos.

"Pagou a pena. Non fumos a Bruxelas de viaxe, senón para denunciar a situación da sanidade pública en Galicia. Eu voltaría a pesares de todo o que ocorreu, porque os demócratas non podemos ter medo. O que queren os autores desa barbaridade é que a xente teña medo", recuerda.

Este martes la Plataforma da Sanidade explicará en Cangas las gestiones realizadas en la capital europea, "porque seguiremos loitando pola sanidade pública e por un CAR para O Morrazo". Señala que la documentación de la denuncia presentada "demostra que temos razón nas nosas demandas".

Mientras recordaba la "odisea" que supuso el regreso, conectando Ámsterdam, Madrid y A Coruña, Penelas señala que los gallegos que acudieron al Parlamento participaron en la vigilia por los fallecidos "por solidariedade, porque temos que mostrar que apostamos pola palabra e a democracia".

Desde que regresó a Cangas, José Penelas perdió la cuenta de toda la gente que se puso en contacto con él para saber cómo estaba tras librarse in extremis de los atentados yihadistas. "Xa perdín a conta. Obviamente todos os amigos estaban preocupados, por iso tivemos que chamar dende Bélxica para tranquilizar á xente", indica.

Gestos

Destacó algunos gestos como el del presidente del Parlamento Galego, Miguel Ángel Santalices, "que se puxo en contacto cos membros da Plataforma para saber cómo estabamos". En general se queda con todos los que mostraron preocupación por su salud.