El Álvaro Cunqueiro vivió ayer una mañana "al ralentí". Varios cortes del suministro eléctrico que se sucedieron durante más de tres horas -aproximadamente entre las 9.30 y las 13.00 h- obligaron a ralentizar la labor del hospital, suspender algunas pruebas de radiología y, según explican pacientes y personal del propio centro, afectaron también al funcionamiento del parking, ascensores y el equipamiento electrónico del centro, como ordenadores, pantallas o las máquinas que emplean los pacientes para sacar su turno. Fuentes oficiales del Sergas aseguran que los apagones fueron "muy breves" y los achacan a "problemas de suministro ajenos al hospital". Insisten además en que no tuvieron repercusión alguna en las áreas críticas del centro, como la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) o los quirófanos, y mantienen con rotundidad que "ninguna" operación resultó afectada debido a los cortes.
Un usuario que contactó con FARO afirma que un familiar suyo tenía prevista una operación de "radiología intervencionista" a primera hora de la mañana en el Cunqueiro. Según relata, debido a los cortes de electricidad el personal sanitario decidió posponer la intervención varias horas, hasta que a medio día se acordó suspenderla y enviar a la paciente a su casa. Según afirma este familiar, la mujer estaría ya sedada y tuvo que ser "retirada del quirófano", donde se habrían quedado "a oscuras". El argumento que le dio el personal sanitario fueron "problemas técnicos". De momento la afectada carece de nueva fecha para la intervención, por la que llevaría esperando un año. Fuentes sanitarias no oficiales confirman que debido a los apagones se suspendió una operación de radiología intervencionista.
Desde el Sergas aseguran que las áreas críticas disponen de un sistema de alimentación ininterrumpida (SAI) que impide que su actividad se vea afectada por cortes de electricidad. En el resto de los espacios hay grupos electrógenos que permiten paliar la falta de suministro, aunque las mismas fuentes apostillan que esas instalaciones "tardan más" en arrancar. Insisten, en cualquier caso, en que los problemas de electricidad se deben a "causas ajenas" al centro.
Los cerca de cinco cortes de energía que se registraron a lo largo de la mañana obligaron a "ralentizar" la labor del servicio de radiología y neumología -en concreto pruebas de espirometría-, además de la actividad que desarrolla el laboratorio. También obligaron a posponer TACs, aunque el Sergas concreta que fueron pocas las pruebas que se aplazaron. Radiología se habría visto afectada por los apagones, a intervalos, entre las 11.00 y pasadas las 14.30 h. Esa circunstancia repercutió a su vez en el servicio de Urgencias, aumentando su saturación. Los problemas con los ordenadores o ascensores también habrían afectado a los ingresos.
Los cortes de electricidad tuvieron su efecto además en el parking, donde los operarios debieron levantar las barreras de acceso mientras duraron los apagones para permitir el acceso y la salida de los vehículos. Pacientes del entorno del Cunqueiro aseguran que esa circunstancia, sumada a los habituales problemas de tráfico que se registran en el entorno del hospital, provocaron un pequeño embotellamiento.
María del Carmen Barbosa es una de las pacientes que ayer no pudo realizar su TAC ante los problemas con la electricidad. "Vine a propósito desde A Guarda para hacerme la prueba", lamentaba esta usuaria, quien asegura que los técnicos optaron por no realizar el TAC cuando ya estaba preparada: "Estaba en la máquina y se fue la luz. Me dijeron que así no me ponían el contraste".
Policía local y viales
El alcalde, Abel Caballero, aseguró ayer que la Policía Local no intervendrá para regular el tráfico en los viales interiores del Cunqueiro ni tramitará denuncias relativas a coches mal estacionados en la zona, ya que -sostiene el regidor- se trata de espacios "privados". Caballero urge a la Xunta que "ponga el parking gratis" para solucionar los problemas de tráfico y que abra la parcela que posee el Sergas en el entorno para crear un aparcamiento gratuito.
