La tarde fue larga ayer en el Enterro da Sardiña y algún que otro grupo de amigos tuvo la idea de llevarse una parrilla encendida que nutrió de carne a los asistentes. Fue una de las notas más curiosas en un Enterro menos concurrido que otros años pero que sirvió para llenar el centro de Moaña de disfraces y de espectadores que llenaron las aceras para ver pasar el desfile. No se lo perdieron ni algunas autoridades locales como la alcaldesa, Leticia Santos, o los ediles Coral Ríos y Salvador Meira, que no tuvieron dudas a la hora de disfrazarse.

Las músicas se agolpaban unas con otras y cada carroza o grupo de amigos bailaban los ritmos que más les atraían. Así, en un carnaval tan tradicional no faltaron las percusiones ni la música de raíz. Eso sí, el reguetón demostró una vez más que está en auge entre las nuevas generaciones.

Xoubiña

El domingo 21 se celebrará en Moaña el Enterro da Xoubiña para todos los escolares de la villa. Se tuvo que suspender este sábado por el temporal.