Ramón González, víctima de la explosión, era un activo militante del PP vigués desde hacía más de 20 años. Iba diario a la sede local. La presidenta del distrito de Casablanca de esta formación, Pilar Cid, colectivo del que el fallecido era secretario, estaba conmocionada: "Siempre estaba dispuesto a colaborar, se desvivía por la gente mayor". Experto en consultoría, "volcado en temas empresariales", según él describió en su perfil de LinkedIn, estaba en el paro tras trabajos en el ámbito de la seguridad. Los cargos del PP de Vigo Elena Muñoz y Chema Figueroa lamentaron la muerte de una persona "muy querida". Vivía en el mismo piso, desde "pequeñito", dicen sus vecinos. Su madre, cuentan, murió hace unos años. No tenía hijos. Hoy recibe sepultura en Pereiró.