El responsable de la empresa que adquirió las jaulas de la antigua cooperativa de producción de rodaballo Loitamar -la chatarrería Import-Export Martínez Souto, con sede en As Neves- señala que la razón por la que la retirada de estas estructuras está parada desde mediados de noviembre se debe a una paralización de esta actividad por parte de Portos de Galicia. Entiende que el organismo que gestiona los puertos de la comunidad actuó por alguna denuncia particular.
Entre abril y noviembre se habían arrastrado hasta la rampa de varada de Domaio unas 300 jaulas, que se desmontaban en la propia rampa se trasladaban en camiones a As Neves en donde el metal se fundiría para nuevos usos.
Restan todavía por retirar otras 300 jaulas de producción de rodaballo, tal y como reconoce el responsable de la empresa que las adquirió y como señalaba recientemente la Asociación de Veciños O Monte Faro de Domaio, que mantienen desde hace años su petición de retirada por el impacto visual que provocan estas jaulas que se encuentran en desuso.
Desde Import-Export Martínez Souto indican que un vigilante de Portos de Galicia avisó a mediados de noviembre que tenían que parar de desguazar las jaulas en el puerto de Domaio "pese a que teníamos acordado con el sector bateeiro los espacios para que pudiesen trabajar en sus bateas en la rampa", indican. Poco después recibieron la notificación oficial.
De todas formas, señala que en enero volvieron a solicitar un permiso para retomar esta retirada y poder sacar del agua toda la instalación. Y es que, además del precio de las jaulas y del canon que deben abonar a Portos por utilizar sus instalaciones, desde esta empresa recuerdan el gasto que supone la situación actual, pues ya tuvieron que acudir en barco a la instalación para asegurar las jaulas amarrándolas con cuerdas, evitando así que se desprendiesen durante los días de temporal del invierno. Y es que el riesgo de algún desprendimiento que pueda dañar alguna batea siempre está presente. De momento este invierno no se registraron incidentes en este sentido.
El Concello de Moaña había pedido a Portos, a petición de varios vecinos, que se intensificase la limpieza de la rampa por los olores que generaban los restos de mejillón y otras especies procedentes del desguace de las jaulas. La administración local entiende que debe completarse la retirada de las jaulas.
