Los acontecimientos violentos vividos el miércoles en Vigo entre gitanos zamoranos y morones vuelve a poner estado de máxima alerta al mercadillo de Cangas. Tanto Policía Local como Guardia Civil incrementarán su vigilancia en la zona con más patrullas encaminadas a impedir no solo que aquellos vendedores ambulantes a los que se impidió instalar en las semanas pasadas intenten de nuevo hacerlo, sino a evitar enfrentamientos entre los clanes. Hay que recordar que los implicados en la reyerta del mes de octubre en el mercadillo de Cangas se les retiró la licencia de forma cautelar.

Reunión de la plaza

Mientras, ayer por la tarde, la concelleira de Industria, Ánxela Vizoso, se reunión con los vendedores de la plaza de abastos en el salón de plenos. La edil calificó la reunión de muy fructífera y se mostró muy satisfecha por el hecho de que hubiera tanta representación de vendedores. Como era lógico, existen posturas encontradas entre los vendedores, pero hay un objetivo común: impedir que la plaza muera. De ahí el entusiasmo que mostraron ante la concejala muchos vendedores para sacar adelante la plaza de abastos. Ánxela Vizoso señala que todo pasa por asentar los puestos situados en la planta baja, por mejorar la infraestructura y poner en marcha métodos de buenas prácticas.

La intención es actuar en la planta superior con la intención de atraer gente. Se habló de fórmulas como mercadillos extraordinarios o jornadas gastronómicas. Vizoso salió muy satisfecha de este primer encuentro con los profesionales y espera que sean más frecuentes.