La comisión organizadora de la muy tradicional fiesta de San Blas en Darbo preparó 2.500 panes que recibieron la bendición de manos del cura párroco y que llevan el claro mensaje de salvar vidas. Comenta el presidente de la citada comisión, Constante Soliño Soliño, que fue un éxito, que los panes se repartieron todos y que la voluntad de los devotos fue grande. Y es que estos pequeños bollos de pan bendecidos solo se pueden llevar a casa tras realizar una aportación económica, que en ocasiones es mucha y en otras no tanto. La organización, desde luego, no está descontenta con lo recaudado, que siempre viene bien para mantener la iglesia y la tradición esta de bendecir los panes, que se lleva celebrando de forma ininterrumpidad desde hace 22 años. Lució el sol y santopudo salir en procesión alrededor del atrio y sin comitiva política. El único representante de la corporación municipal que acudió a San Blas fue el portavoz del Partido Popular, Rafael Soliño; el gobierno local ya había advertido que quería seguir la pauta marcada desde principio de su mandato y no mezclar las cosas de la política con las de la Iglesia. Y así fue. La misa de 10.00 fue muy concurrida, pero también la de las 12.30 horas y las de las 18.30 horas. Así fue como la comisión agotó los 2.500 panes que había preparado para la ocasión.

Aunque de forma más íntima, en la ex colegiata de Cangas también se celebra a San Blas. No hay procesión concurrida, pero sí culto especial dedicado al santo. Fue en horario de tarde y hubo también pan bendecido por el curra párroco de Cangas para que los feligreses se lo pudieran llevar a casa y ayudarles a superar esas molestias de garganta que pueden aparecer a lo largo del año o que ya se tienen. Todos los fieles acudieron a la ex colegiata con pan bajo el brazo para bendecirlo.