El alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos, tras la resolución judicial de archivar el caso del tiroteo de Valladares, en el que resultó herido un hombre de etnia gitana del clan de los Zamoranos, pide a la Justicia agilidad en el proceso que se abrió en el juzgado número 3 de Cangas por la reyerta en el mercadillo el pasado día 16 de octubre, una semana antes del tiroteo, y que enfrentó al clan de los Morones con el de los Zamoranos. El alcalde recuerda que en Cangas sí que la Policía Local y la Guardia Civil identificaron a personas y hubo incluso testimonios. Recuerda que hay vendedores pendientes de una decisión judicial y que la medida de suspensión cautelar a los implicados en la reyerta no se puede mantener eternamente, por eso considera que sería conveniente una rápida decisión judicial.

Xosé Manuel Pazos no quiere entrar demasiado a valorar la decisión de archivar el caso del tiroteo de Valladares. "Eu non xuzgo aos xuices. Pero está claro que este tipo de decisión xeneran sensacións de inseguridade e impunidade. É unha pena que non se poidera chegar a actuacións más contundentes", señala el regidor local.

Por su parte, la concejala de Comercio e Industria, Ánxela Vizoso, señala respecto a la polémica decisión judicial, que darle carpetazo a este asunto es dejar a los concellos "co cu ao aire" para regular los mercadillos ambulantes en sus respectivos municipios. Asegura que el conflicto perjudica a todos los comerciantes, no solo a los implicados. Al igual que el regidor local, Ánxela Vizoso también pide agilidad judicial para decidir sobre la reyerta sucedida en Cangas, ya que el Concello adoptó de forma administrativa medidas cautelares.

Ninguno de los implicados a los que el Concello de Cangas retiró de forma cautelar la licencia para instalar un puesto ambulante en el mercadillo de Cangas presentó alegaciones contra el expediente. Pero aún así el gobierno sabe que no puede mantener de forma indefinida la suspensión cautelar y desea que la Justicia se pronuncie al respecto para adoptar posturas ya firmes.

De momento, la situación en el mercadillo de Cangas es tranquila. El líder del clan de los Morones, Sinai Giménez, solo apareció una vez por Cangas después de la pelea en el mercadillo, donde resultó herido en la cabeza. Cuando lo hizo también fue después del tiroteo de Valladares, pero no según la Policía Local, no bajó del coche. Ahora mismo la intensidad en los controles de acceso al mercadillo de los viernes por parte de Guardia Civil y Policía Local bajaron, al tiempo que se rebajó también la tensión, aunque nadie sabe cuando saltará de nuevo.