El Concello de Cangas contratará en los próximos meses a una veintena de personas perceptoras de la renta de inserción social de Galicia (Risga), cuyos costes asumirá, por tercer año consecutivo, la Consellería de Traballo e Benestar. Los representantes del gobierno tripartito se reunieron ayer para valorar la propuesta y decidir qué puestos de trabajo se pretenden cubrir por las personas inscritas en la oficina de empleo y afectadas por esta situación. Serán, principalmente, conserjes y limpiadores de edificios públicos, barrenderos, peones agrícolas y forestales para desbroces y mantenimiento de jardines, electricistas, administrativos y cuidadores de instalaciones deportivas.
Los beneficiarios de estas ayudas obtienen un contrato de siete meses que debe aportarles experiencia laboral, inclusión activa y evitar la "cronificación" de las situaciones de riesgo, según la Xunta, que distribuye las ayudas entre los concellos en función de su población. En Cangas hay más de un centenar de personas perceptoras de la Risga, según datos municipales, y lo que se intenta es "paliar" la situación con trabajos temporales y el cobro de salarios sensiblemente superiores a la ayuda económica que perciben.
Además, estos empleos sirven a los concellos para disponer de personal temporal para realizar tareas de interés general, sin la necesidad de llevar seis meses cobrando la Risga, pues la orden ha eliminado ese requisito. Tendrán preferencia personas con cargas familiares y la mayoría de los contratos se realizan por el 75 % de la jornada laboral. Es la Consellería de Traballo e Benestar la que paga los costes salariales y la cotización a la Seguridad Social de estos trabajadores.
En la reunión se ayer entre el alcalde, Xosé Manuel Pazos, y los concejales de Obras e Servizos y Benestar, Mercedes Giráldez y Tomás Hermelo, se acordó iniciar los contratos en junio para no "solaparse" con los que financia la Diputación.
