La Asociación "A Borneira" de barcos de Séptima Lista de Cangas celebra el sábado asamblea para elegir a un nuevo presidente y renovar parcialmente la junta directiva. En el orden del día de la sesión aparece el más que polémico asunto del regreso a la apertura de expediente para aquellos socios que incumpla la ordenanza de atraques, que establecer que los impartes deben atracar dentro y los pares fuera. Durante un tiempo, esta norma se relajó notablemente, debido a las bajas que se habían producido, que provocó que quedaran más plazas de atraque en los pantalanes de Cangas y Vilariño, pero de un tiempo a esta parte los problemas que parecían que se habían desvanecido regresaron. Las protestas por golpes aumentaron en el último año y hay socios que exigen que se aplique a rajatabla la citada ordenanza.

El problema resurge porque las plazas de atraque también se hicieron más anchas para adaptarse a la manga que ahora tienen las embarcaciones, que es casi siempre superior a los tres metros.

Pero también se anuncia revuelo político. Desde la asociación se asegura que el Concello de Cangas no cumplió con su promesa de entregar la subvención anual a cambio de las obras realizadas por "A Borneira" para reparar la rampa de Massó. "Parece que no hay mucha voluntad de conceder la subvención", señala el secretario de esta asociación de Séptima Lista, Samuel Pousada. Por eso, en la asamblea, que se celebra a partir de las 10,30 horas del sábado, en el salón de plenos del Concello de Cangas, la actual directiva dará cuenta de las conversaciones que se mantuvieron con el alcalde Xosé Manuel Pazos y con el edil de Urbanismo, Mariano Abalo, de las que no parece haber salido demasiado contentos. También se dará cuenta de la reunión mantenida con la jefa provincial de Costas, Cristina Paz Curbera, así como mostrar el apoyo a la Federación Galega de Séptima Lista que pide la dimisión de la conselleira de Pesca, Rosa Quintana. En esta misma asamblea se realizará también una nueva adjudicación de plazas en los pantalanes de Cangas y Vilariño. Martín Piñeiro presentó su dimisión como presidente en julio y en agosto, de forma provisional, ocupó el cargo David Barros, que ahora, por razones personales, quiere dejarlo, de ahí que la asamblea tenga que elegir un nuevo presidente.