La víctima declaró en las dependencias judiciales que cuando se produjeron los hechos acaban de llegar a Valga, que aún ni habían abierto las maletas. Comenta que hizo la cena y se la llevó a la habitación a su pareja, también declaró que habitualmente duermen juntos en la habitación de atrás pero que ese día ella decidió dormir en la de delante porque tenía mucho calor. Señala ante el juez que en ese momento él estaba tranquilo., pero que alrededor de las 05.00 horas ella se despertó porque él fue corriendo a la cocina. Dice que le vio coger tres cuchillos y que inmediatamente la agarró y la atacó con el cuchillo sin mediar ningún tipo de discusión previa. Afirma que no sabe por qué la atacó y apunta que mientras la golpeaba él manifestó "¡Qué mala ere s de matar!", y anunció que la iba a matar y después tirar en el río para que nadie la encontrara. También manifestó que en Cangas hubo un incidente el 11 de julio de 2014, cuando la persiguió con un palo. Negó ante el juez que ella acudiera a la habitación de él a darle una pastilla.
Él declaró ante el Fiscal que es retrasado mental, que toma pastillas que pone debajo de la lengua y que se las daba su pareja. Manifiesta que el día de autos fue a cama sin cenar y que sobre las 05.00 horas "le pegó la veleta". Afirma que estaban los dos en la misma cama y que ella le pegó con un palo y que el corte que tiene en la mano se lo hizo él, que se quería matar cuando se dio cuenta de lo que había hecho.
El psiquiatra que lo atendió en el Clínico de Santiago afirma que el detenido tiene un trastorno ansioso-depresivo.
