Si hay dos asuntos de importancia que el gobierno bipartito de Moaña tiene que resolver, uno es la finalización del paseo marítimo de Seara, que se complica por los problemas en la cesión de los terrenos, y el otro, que atañe al empleo, la licencia a la Conservera Iglesias. Las obras de adaptación de la antigua nave de Hermanos Cruz, en A Xunqueira, fueron paralizadas por el Concello, pese a tener informe favorable de la Axencia de Protección da Legalidade Urbanística (APLU), por entender que se excedía en la licencia concedida.
El concejal de Urbanismo, Odilo Barreiro (BNG), recibió ayer en el Concello a una representación de esta empresa, integrada por uno de los propietarios, los asesores de la conservera, el comité de empresa y representantes sindicales. El edil planteó la situación actual que no es otra más que el Concello sigue a la espera de la resolución de Urbanismo de la Xunta al expediente de legalización de las obras. La única novedad que aportó el concejal fue la reunión que recientemente había mantenido, junto con la alcaldesa, Leticia Santos, con la directora xeral de Urbanismo de la Xunta, a la que le pidieron celeridad a la hora del informe al expediente.
Odilo Barreiro asegura que en la reunión de ayer insistió en que desde el Concello se está actuando con total transparencia y que no hay motivos para hacer pensar a los trabajadores que se quiere poner trabar a la apertura de esta empresa. Es más dice que por parte del Concello se está actuando con la mayor diligencia y se les ofreció la posibilidad de acceder a los expedientes para confirmar las fechas de tramitación. El concejal sí que insiste en que fue problema de la empresa, que esta licencia se demore ya que desde que se abrió el expediente de paralización de las obras hasta que la empresa lo recogió, pasaron cinco meses, desde febrero a junio.
En la reunión de ayer se planteó el problema que le está suponiendo a la empresa esta situación ya que está en juego el cumplimiento de los plazos que marcó la concesión de la subvención para la rehabilitación de la fábrica.
Hay que recordar que Conservas Iglesias, con una planta en las naves de Ojea, en Cangas, adquirió la antigua nave de Conservas Cruz, en Moaña, ubicada en la calle Rosalía de Castro, para trasladar toda su producción de Cangas, y aumentar la actividad de la conservera. De hecho absorbió la plantilla de Hermanos Cruz parte de la cual sigue trabajando en la conservera de Ojea aunque otra se tuvo que ir al paro por falta de espacio en la nave canguesa y permanece a la espera de que se abra Moaña.
Una representación amplia de la plantilla ya acudió al último pleno del Concello de Moaña para exigir rapidez al Concello en la tramitación de la licencia porque estaba en juego la subvención y sus puestos de trabajo, ya que sin esa inyección de dinero la empresa estaría abocada a cerrar.
