En medio de una intensa lluvia y de un viento no menos fuerte ayer comenzó a cobrar forma uno de los nuevos atractivos de la Praza Massó de Bueu y que sin duda será uno de los referentes culturales del municipio: la escultura en gran formato diseñada por el artista José Solla.
La escuela provincial de canteros de la Diputación de Pontevedra ha sido la encargada de trasladar del papel a la piedra los 500 mosaicos diseñados por Solla, un trabajo que pretende ser un gran homenaje a la comarca de O Morrazo y a sus vecinos. La escultura constará de dos grandes bloques, de cinco metros de longitud y tres de alto, y en total han sido necesarias más de medio centenar de placas de piedra para que el diseño imaginado por Solla tenga su traslado a la realidad.
Las piezas están en Bueu desde la semana pasada y ayer comenzó su laborioso ensamblaje. Esta tarea la está realizando la propia escuela de cantería de la Diputación, con la ayuda del Concello de Bueu, que puso a su disposción una grúa y el transporte. Este trabajo contó también con la colaboración desinteresada de la Cofradía de Bueu, que cedió una máquina para descargar las placas, algo que agradecieron ayer desde el ayuntamiento.
El montaje tiene que estar concluido el viernes puesto que el acto inaugural está programado para el sábado a mediodía y se espera la presencia de la presidenta de la Diputación, Carmela Silva. El artista estuvo ayer a mediodía con el concejal Fidel Castro a pie de obra, comprobando como avanzaban los primeros trabajos y como su gran obra empezaba a tomar forma.
El diseño de este monumental trabajo es una especie de regalo de José Solla al Concello de Bueu. Una muestra de agradecimiento después de que la corporación decidiese darle su nombre al paseo de Agrelo-Portomaior, un lugar muy frecuentado por el artista durante sus estancias en Bueu.
