La concejala de Cangas Mercedes Giráldez (BNG) acompañó a los representantes de las cofradías de Cangas al "Encuentro nacional" de Alzira como teniente de alcalde y a defender la candidatura del municipio como sede de la próxima edición del evento. Lo hizo como representante oficial, por delegación del alcalde y ante la imposibilidad de desplazarse la edil de Turismo, Tania Castro, y fue el Concello el que asumió los gastos porque Giráldez acudía en su representación. Así lo explica la también concejala de Obras e Servizos en respuesta a la crítica "patética" de Jesús Graña (PP), al que califica de "rencoroso e mal perdedor", de inquina personal hacia ella y de aprovechar cualquier intervención para atacarla.

Para la concejala nacionalista, el asunto del viaje a Alzira es mucho más simple del que describe Graña con su "berrinche", pues no se trató de una estancia vacacional sino de actos oficiales para promocionar las bondades de Cangas y su disposición a acoger el 39º Congreso Nacional, en septiembre de 2016, para el que finalmente fue elegida la localidad morracense. Con los mismos objetivos se desplazaron en otras ocasiones los concejales de turno, recuerda, y cita a varios del PP como Luis Boullosa, Alba Cordeiro o Laura Vidal. "Como é normal e entendible, nestes casos os gastos por representación corren a cargo do Concello, sexa quen sexa o representante político que vaia", sostiene Giráldez.

Con los mismos argumentos responde a las insinuaciones sobre el "fervor religioso" de la teniente de alcalde, que defiende su presencia en Alzira como un acto oficial en apoyo de Cangas y sin un despliegue de miembros y de gastos "fastuosos e despilfarradores" como los que realizaron los gobiernos del PP a Estados Unidos o las Azores para promocionar el Mundial de Catamaranes o celebrar actos de hermanamiento. Lamenta que Graña no haya aprendido nada en cuatro años en el Concello y se limite a "perder o tempo con tonterías".