El joven que fue detenido el domingo a mediodía tras un altercado en un bar de Bueu, donde a la salida llegó a disparar varias veces al aire con un arma de fogueo, quiso mostrar ayer públicamente su arrepentimiento. "Quiero pedir disculpas por lo que hice y por mi comportamiento con la gente del local y con los clientes, que no tenían culpa de nada", manifestaba ayer tarde.
Reconoce que su actitud y reacción del domingo no fueron las adecuadas y por eso ayer por la tarde se acercó hasta el lugar de los hechos, el bar Muíño, a disculparse por lo sucedido. Los propietarios del establecimiento también se pusieron en contacto con él. "Me dijeron que me iban a pagar por los pocos días que estuve trabajando aquí", manifestó ayer tarde.