La segunda quincena del mes de julio. Ésa es la fecha prevista para la esperada apertura de la nueva zona de acampada de la isla de Ons, que desde este verano tendrá la consideración de un camping de segunda categoría. Las obras están en marcha desde hace semanas y tanto la concesionaria como la contratista trabajan a marchas forzadas para que la inauguración sea "lo antes posible", en palabras de los directores de obra, que eludieron dar una fecha concreta.

Aprovechando que el viernes se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente, la conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, Ethel Vázquez, se desplazó ayer a la isla buenense para conocer de primera mano el estado de los trabajos y las previsiones para la puesta en marcha de unas instalaciones cuyo contrato fue adjudicado hace ya dos años. "O obxectivo é que esté rematado este verán e forma parte da aposta da Xunta para un parque nacional máis atractivo dende un punto de vista dun turismo sostible", aseguró la conselleira.

Esa preocupación por la sostenibilidad y por la utilización de energías limpias se percibe en el propio proyecto, que fue explicado a pie de obra por uno de los arquitectos. En estos momentos las máquinas que trabajan en el lugar de Chan da Pólvora están acabando la cimentación sobre la que se asentarán los distintos bloques que albergarán los servicios del camping: recepción y cafetería, cabaña del guarda y aseos. En las semanas previas ya se trasladó hasta el lugar la depuradora que se encargará de tratar todas las aguas residuales del complejo y falta aún el depósito de aguas grises, que permitirá reutilizar el agua de las duchas y lavabos para las cisternas. En la cubierta de los módulos se colocarán paneles fotovoltaicos para generar energía eléctrica, que será complementados con paneles solares para el agua caliente y un pequeño generador por si surge algún problema.

El material predominante en estas nuevas construcciones será la madera. "Madera de castaño gallego en vigas, pavimentos y tarimas. Luego habrá más vigas de eucalipto gallego encolado, mientras que las fachadas serán de eucalipto gallego con un corte especial para que no se retuerzan", explicaba el arquitecto director de obra. Las instalaciones se completarán con un aljive de 270 metros cúbicos de capacidad -que se llenará durante los meses de invierno gracias a dos pozos- y una potabilizadora de agua.

El lugar de Chan da Pólvora se encuentra en la parte central de la isla, en una zona elevada y con unas vistas privilegiadas. La zona de acampada ocupa alrededor de 8.000 metros cuadrados y tendrá capacidad para 276 campistas. Entre los servicios que se ofrecerán a los visitantes está incluso un parque infantil de 800 metros cuadrados y está previsto que durante los próximos años se planten hasta 300 árboles en este entorno.

La conselleira estuvo acompañada durante su visita por la directora xeral de Conservación da Natureza, Verónica Tellado; el director del Parque Nacional Illas Atlánticas, José Antonio Fernández Bouzas; el alcalde de Bueu, Félix Juncal; y por los concejales electos José Garcúia Cuervo y Berta Pérez, así como por personal de Parques Nacionales, que le explicaron los trabajos realizados para erradicar de Ons especies invasoras.

La reconversión de Chan da Pólvora en un camping de segunda categoría implicará que la acampada dejará de ser gratuita y pasará a ser de pago, algo que desde la Xunta de Galicia siempre se ha vinculado a una mejora de las instalaciones y servicios. La concesionaria es la empresa Iniciativas Turísticas Ons, del grupo empresarial Acuña, y que en la fase de concurso público ofreció un precio de pernocta de 6 euros por campista.