Ocho embarcaciones robadas durante la madrugada en el puerto de Arcade aparecieron varadas en la mañana de ayer en el muelle de Paredes, Vilaboa, al otro lado de la ensenada. Los ladrones se habían llevado los nueve motores fueraborda (una de ellas tenía dos) que tenían estas lanchas.

Se trata de dos embarcaciones de recreo y otras seis lanchas de marineros, cinco de ellas de naseiros pertenecientes a la agrupación Alvedosa, y una más de un miembro de la agrupación de marisqueo a flote. Marineros de las localidades de Pontesampaio y Arcade que ahora ven como, por culpa de esta sustracción, peligra su forma de vida debido a los cuantiosos gastos que genera el quedar sin motor en las embarcaciones, cuyos seguros no cubren el robo. Según explicaba ayer uno de los afectados, los motores sustraídos estaban valorados entre los 8.500 euros del más caro a los 4.000 del más económico. En cualquier caso, los marineros tendrán que realizar una inversión importante para volver con sus lanchas a trabajar en el mar de tal forma que asegura que de momento y estos días "se quedan sin medio para ganarse al vida".

Los ladrones tuvieron que llevarse los barcos entre las tres o las cuatro de la madrugada, aprovechando la marea viva y tras observar el lugar en el que quedaron varados los barcos en Vilaboa. Se cree que los ladrones habían vigilado sus objetivos y junto a las lanchas aparecieron los sillones de una furgoneta que se sospecha pudieron haber sustraído para perpetrar el robo. Luego retiraron los asientos para hacer más sitio a los motores.

Los marineros se quejan de los continuos robos que están sufriendo en embarcaciones en la ría de Vigo. Ya hubo denuncias en Vilaboa, Cesantes, Redondela o Chapela.

Desde Portos se recuerda que la competencia en materia de seguridad en estas instalaciones portuarias corresponde a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Con todo, aseguran que se están dando pasos para dotar a los puertos de la zona de medidas de seguridad como cámaras de vigilancia. También explicaron que precisamente en el puerto de Arcade estaba en marcha un plan para arreglar la barandilla de acceso, aunque esta no habría impedido el robo.