Mañana arranca el mes de julio y con él empiezan los dos meses centrales de la temporada turística en O Morrazo. De momento el tiempo no está acompañando, con días inestables en los que el sol y las lluvias se alternan. Esto juega en contra del sector hotelero en una zona en la que las numerosas playas son el principal argumento para atraer turistas. En estos momentos la mayor parte de los establecimientos hoteleros de la comarca tienen menos de 50% de sus habitaciones reservadas para el mes de julio. Incluso sufrieron algunas cancelaciones por esta cuestión. Eso sí, los responsables de los hoteles confían en que el sol se establezca definitivamente y las reservas de última hora o incluso los clientes que llegan sin aviso previo permitan llenar las habitaciones. Confían sobre todo en el mes que transcurre desde mediados de julio hasta mediados de agosto. El año pasado se rozó el lleno en la comarca en esos días.

Por municipios en Cangas varía la ocupación según el hotel. En el Airiños, por ejemplo, reconocen que las reservas se están moviendo algo mejor que hace un año, pero de momento tienen ocupado un 40% de sus 56 habitaciones para este mes de julio. Si el tiempo acompaña, lo normal es que en julio ronden el 80% y en agosto el lleno. Sus responsables se muestran optimistas pese al lento goteo de reservas.

En el Hotel Jucamar también esperan llenar "con reservas de última hora". El año pasado en julio prácticamente tuvieron ocupada sus 40 habitaciones. Esperan que este año la situación sea similar.

El mes de junio también atrajo a visitantes a la comarca, sobre todo los fines de semana con buen tiempo "en los que trabajamos como en julio", apuntan algunos hoteleros.

En el hostal y apartamentos Rodeiramar tuvieron una media de 55% de ocupación en el mes que concluye hoy. La mayoría eran clientes del mercado nacional, pero alrededor de una quinta parte procedían del extranjero. Alemanes, franceses y estadounidenses son los que más vinieron a Cangas en junio, pero también se hospedaron ingleses, irlandeses o belgas.

En Bueu el Hotel Loureiro cuenta con un 60% de sus 26 habitaciones ya reservadas para la primera quincena de julio. Eso sí, a partir del viernes día 11 ya tienen huéspedes suficientes para llenarlas, y así hasta mediados de agosto. Consideran que la temporada están siendo "igual que el año pasado", aunque no se libraron de cancelaciones por el tiempo de los últimos días. La clave de esta alta ocupación está en "los clientes que repiten de un año para otro".

En el Hotel Incamar tienen reservadas más de la mitad de sus 40 habitaciones pero no se fían. "Ahora si llueve, cancelan las reservas. El año pasado julio fue nefasto, pero mejoró la cosa en agosto", recuerdan.

En Moaña, por su parte, el Hotel Bienestar tiene apalabradas el 30% de sus habitaciones "pero con calor es común recibir muchas llamadas a comienzos de semana pidiendo una habitación para el fin de semana". En el Prado Viejo la reserva para julio también es inestable. En agosto ya tienen garantizado el 50% de ocupación.