Aunque natural de A Rúa, en Ourense, está afincada en Vigo desde hace treinta años. Xulia Alonso publicó en 2010 el libro "Futuro imperfecto" que empezó a escribir en 2005, dirigido a su hija, en el que narra su experiencia de juventud con la droga, en concreto con la heroína, de cómo pudo salir de esa adicción, pero que ocasionó la dolorosa pérdida de su compañero y padre de su hija, a causa del SIDA. Xulia Alonso estará mañana en Moaña, a las 21.00 horas en la Biblioteca de Quintela, para participar en la tertulia de la Lonxa Literaria dedicada a su libro.

-¿Está trabajando en alguna otra publicación?

-Estoy escribiendo pero no pensando en una publicación.

-¿Se podría decir que el libro que mañana protagoniza la tertulia de la Lonxa Literaria de Moaña es una historia de amor, de una pérdida dolorosa?

-Es un libro escrito para mi hija dándole nuestra historia, la historia de sus padres. Es una historia de amor marcada por las experiencias vividas en los años 80, de cuando éramos jóvenes, claro, y que tuvo que ver con nuestra adicción a la heroína y la muerte de mi compañero Nico a causa del SIDA. Esa es el eje central de la historia.

-¿La historia se repite en la juventud de hoy en día?

-Los peligros para la juventud son los mismos. Uno de los problemas de esta etapa de la vida es que se carece de algo tan importante como la experiencia y ésta se consigue con el tiempo. Por eso el ser humano tropieza en las mismas piedras. Los que vienen detrás aprenden casi igual que los que les precedimos. La juventud de ahora tiene los mismos, incluso más riesgos, porque las sustancias que están a su alcance son muchas más. También es cierto que tienen más información, aunque no se habla con la naturalidad y franqueza con la que hay que hablar de estos temas a la gente joven. Hay que hablar antes de la adolescencia, porque a veces es demasiado tarde. Alrededor de las drogas hay muchos tabús y perjuicios y un discurso un poco lejano, por eso no les llega, no les acobarda. La juventud tiene un punto de arrogancia y hace que el riesgo siempre esté ahí porque no tiene miedo.

-¿Cuál fue la respuesta de su hija cuando leyó el libró?

-Sucontenido ya lo conocía de antes, lo fue conociendo poco a poco a medida que fue creciendo. El libro fue un ejercicio personal que yo hice porque necesitaba dejar constancia de esta historia de una forma duradera. Cuando ella lo leyó, lo hizo, al margen de una historia que le tocaba de cerca, como un libro y, en principio, tal y como está narrado le gustó. La historia ya la conocía, pero sí pudo saber detalles más emocionales.

-¿Es un libro pedagógico que puede ayudar a la juventud a alejarse de las drogas?

-No lo escribí pensando en la juventud,sino en mi hija y sus hijos, tampoco lo escribí pensado para ser publicado. Por azar se presentó la oportunidad de publicarlo y mi familia y yo consideramos que podía estar bien. pero es un libro que está escrito con la intención de transmitir una experiencia y servir de advertencia. Esa es mi intención, aunque de ahí a conseguirlo hay mucho. Es un libro que no solo narra hechos, sino emociones con la intención de que sirvan de advertencia.