La Guardia Civil investiga el origen posiblemente intencionado de un vehículo que estaba estacionado en la carretera provincial que sube al lugar de A Torre, en la parroquia buenense de Cela. Los hechos ocurrieron durante la noche del viernes y fue necesaria la presencia de una dotación de los Bombeiros do Morrazo para sofocar el fuego.

La hipótesis más probable es que el suceso tiene un origen de carácter intencionado. Según explican las fuentes consultadas, en los bajos de la parte trasera del automóvil -un Seat Ibiza- se localizó una botella que al parecer contenía aún restos de lo que podría ser combustible. Además, un primer examen revela que el fuego tuvo dos focos independientes: uno en la parte delantera y otro en la parte de atrás. No obstante, el estado en el que quedó el coche, completamente calcinado, dificulta las investigaciones y la obtención de posibles pruebas o pistas.

La alerta saltó alrededor de las once y media de la noche del viernes, cuando el vehículo que estaba estacionado en la vía pública comenzó a arder. Los dueños lo habían dejado muy cerca de su lugar de residencia y a apenas 100 metros del cruce con la carretera general PO-551. Inmediamente se dio aviso a los servicios de emergencia y hasta el lugar se desplazaron Bombeiros do Morrazo, Guardia Civil y la Policía Local de Bueu. El fuego calcinó en poco tiempo el Seat Ibiza y ayer fue la Policía Judicial del cuartel de la Guardia Civil de Cangas quien asumió las investigaciones. Debido a las características del suceso es probable que se solicite la colaboración del equipo especializado en incendios de A Coruña, que ya se desplazó a Bueu en el mes de enero cuando se incendió la ambulancia del servicio de urgencias sanitarias del 061.

Éste es el segundo incendio en un coche en los últimos días. El anterior fue en la noche del miércoles al jueves en Berducedo y en este caso también se están investigando las circunstancias.