Las valoraciones al nuevo paso que dio ayer la Xunta en relación con las variantes de la comarca no se hicieron esperar. El alcalde de Cangas, José Enrique Sotelo, acogió positivamente las modificaciones previstas. "Parece que se acolle o que no seu momento consensuamos entre todos os grupos políticos de Cangas e os colectivos afectados". Reconoce que ahora toca "analizar con detalle como se recolleron estas alegacións, xunto aos técnicos".
De todas formas, más allá de actuaciones que pueden ser importantes como sustituir el relleno del primer tramo por un viaducto, el regidor pone en valor el hecho de que la carretera vaya a estar al nivel de las fincas y no se convierta en una vía cerrada a los viandantes, como se proyectaba en un comienzo.
Sotelo no oculta que la parte más difícil tiene relación con la inversión económica necesaria para que la variante que libere de tráfico el centro de Cangas se convierta en una realidad. Destaca el compromiso de la Xunta para, por lo menos, acometer lo antes posible el tramo que considera prioritario, entre la Avenida de Marín y el comienzo del nuevo vial en la carretera hacia Bueu.
Valora que se continúe con la tramitación, pues el proyecto inicial se remonta a hace casi dos años.
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