Los problemas de seguridad en torno al estanque de los jardines de O Señal, en Cangas, donde se han registrado varias caídas de niños y resbalones de personas mayores, han aconsejado al Concello instalar una valla perimetral de protección con el fin de evitar que las personas se acerquen demasiado a la zona de agua y puedan producirse accidentes. Tras recibir varias quejas en este sentido, el gobierno local mandó acordonar la zona con las mismas vallas de obra utilizadas para restringir el aparcamiento de vehículos durante la Semana Santa, y en los próximos días tiene previsto colocar una balconada de acero inoxidable "que combine la seguridad y la estética", en palabras de los representantes municipales, que descartaron la idea inicial de hacerlo en madera.

Además de los problemas de seguridad y las caídas al agua, desde la construcción del estanque -una laguna artificial en forma de cubierta de barco, realizada en hormigón y recubierta con gravilla de playa- se han producido también actos vandálicos como los vertidos de jabón y lejía, afectando a la mortandad de peces y ranas que lo habitan, así como de envases y botellas de bebidas. No obstante, ese tipo de fechorías no podrán evitarse con el vallado perimetral, que evita convertirse en una "pantalla visual" para los viandantes.

Pistas de petanca

El Concello ya ha comprado los materiales y el inicio de los trabajos es "inmediato". La actuación incluye acondicionar en el entorno dos campos de petanca, a propuesta del concejal de Deportes, Francisco javier Soliño. Se repartirán en forma de "L", una de ellas en paralelo con el estanque y otra hacia la zona donde se ubican los aparatos de gimnasia de mantenimiento para personas mayores. Las nuevas pistas vendrían a complementar la que ya existe en la explanada de Ojea, cuyos usuarios se quejan de los rigores del sol cuando llega el verano. La arboleda de O Señal evita lo convierte en una zona de juego más agradable.