Horas antes de que el Consello de la Xunta de Galicia de ayer declara de emergencia las obras para reparar el talud dañado por desprendimientos en el corredor de O Morrazo, la vía volvía a sufrir otra incidencia. A lo largo de la madrugada del jueves se produjo un desplazamiento de lo que se denomina neopreno de apoyo en el estribo, en la viga de la margen izquierda que sostiene el viaducto de A Portela. Se trata de un elemento que se instala para evitar el desplazamiento de la viga sobre el pilar del viaducto. Este nuevo incidente obligó a cortar el acceso al corredor desde el polígono de Castiñeiras y a habilitar solo un carril desviando el tráfico en sentido a Cangas por una carretera local hacia la PO-551. Se podía circular de Cangas a Aldán, pero no en sentido contrario.

Conservación Integral Pontevedra Norte ya inició las operaciones con el fin de proceder a la reparación en el plazo de tiempo más breve posible. Ayer, las previsiones eran optimistas y se esperaba que, para hoy, esta nueva incidencia, que afecta a un kilómetro del corredor, quedara resuelta.

En lo que va de año el corredor es un verdadero quebradero de cabeza para la administración autonómica y, como no, para los usuarios que diariamente transcurren por éste. Desde la salida a Cangas, el corredor se encuentra lleno de señales que indican obras en el talud sito en el vial de salida a Cangas y que desvían el tráfico. Primero los conos instalados en la vía conducen al automovilista hacia la entrada de Cangas al corredor, cuyo vial se convirtió de doble circulación, para que después los vehículos salgan a la rotonda que hay debajo del viaducto de Ameixoada y vuelvan a entrar al corredor. Después del falso túnel la vía vuelve a estar interrumpida por culpa del segundo derrumbe. Los conos alejan el tráfico del talud que se precipitó sobre la calzada. Apenas unos kilómetros más tarde, los conos vuelven a aparecer para desviar el tráfico por su solo carril en dirección Aldán, impidiendo que los vehículos circulen en sentido contrario.

Esta nueva incidencia originó a primera hora un poco de caos circulatorio tanto en la rotonda que hay en Castiñeiras como en la de Ameixoada, con alguna retención del tráfico a primera hora.

Por otra parte, el Consello de la Xunta de Galicia, en su reunión de ayer, declaró de emergencia las obras de reparación del corredor de O Morrazo en el ramal de acceso a Cangas, en el punto kilométrico 11+700 y en el tronco de esta infraestructura, a la altura de PK 12+700. El importe de esta actuación se eleva a 822.000 euros y los trabajos consisten en la excavación del terreno, desmontaje del muro actual y la construcción de un nuevo muro de bloques de piedra granítica. Las obras comenzaron el pasado 27 de marzo y consisten en la excavación del terreno, desmontaje del muro actual y la construcción de otro de bloques de piedra granítica a una altura de 4,5 metros. La Axencia Galega de Infraestructuras se estima que las obras se prolonguen por un plazo de 4 meses.