Cada mañana el entorno de la rotonda de Broullón amanece lleno de coches, aparcados de forma irregular en el arcén situado en los alrededores del acceso al Corredor do Morrazo, en la PO-313. Recientemente esta situación, que se pretende corregir con la entrada en funcionamiento de los aparcamientos disuasorios, volvió a ocasionar quejas de los vecinos de este barrio de la parte alta de Moaña.

El espacio elegido para el parking en superficie de Broullón corresponde a una superficie que quedó vacía con la construcción del Corredor y que se encuentra en el punto kilométrico 7+300, en medio del enlace con la PO-313.

Enlace con Rande

En Domaio el nuevo espacio se construirá en un tramo en desuso de la antigua carretera general. Será necesario realizar un desmonte de piedra. Está próximo a la glorieta de enlace con el puente de Rande. Se propuso también como alternativa una propiedad privada con unos 3.000 metros cuadrados de superficie, en el límite con el término municipal de Vilaboa. En esta zona también son decenas los coches que aparcan todos los días para compartir vehículo en los trayectos hacia Vigo.