Lo que parecía un brote verde en la sequía que atraviesa el sector de la construcción en Moaña se ha quedado en un mero intento que ha sido frenado por el nuevo Plan de Ordenación do Litoral (POL) de la Xunta para la protección paisajística de los municipios con costa. Dos promotores de Moaña, vecinos de Domaio, presentaron a finales del año pasado un proyecto para la construcción en esta parroquia de un albergue juvenil destinado a alojamiento y actividades de ocio y aprendizaje de deportes en unos terrenos en A Borna, junto a la PO-551(margen derecho en dirección a Moaña) calificados de suelo rústico y que se encuentran dentro de la unidad de paisaje 06-07-382 Isamil, del POL. Pero el proyecto ha chocado con el informe desfavorable vinculante del Instituto de Estudios do Territorio (IET), de la Consellería de Medio Ambiente e Infraestructuras, que considera que la actuación proyectada no se ajusta a los criterios y principios del POL, ya que provoca un impacto visual y paisajístico muy fuerte que alteraría la calidad paisajística de un tramo costero de alta exposición visual.

El informe reconoce que los usos sí podrían incluirse dentro del grupo al que hace referencia el artículo 46.2 e-1 del POL de "nuevas construcciones destinadas al turismo en el medio rural y que sean potenciadoras del medio en el que se sitúen", sin embargo añade que la construcción supondría un gran impacto sobre el paisaje derivado de las propias características de la parcela, con una complicada topografía en pendiente en relación con el viario. Considera que el emplazamiento no se encuentra fundamentado en ninguna razón que lo sustente, en relación con la existencia de localizaciones alternativas o la misma idoneidad del lugar para el desarrollo de las actividades de ocio y aprendizaje deportivo que es dificilmente justificable. En el documento los promotores aluden a que las actividades podrían ser náuticas, de senderismo, BTT, orientación, tiro con arco o escalada, entre otras.

El albergue se proyecta en una parcela de 3.082 metros cuadrados junto a la carretera general PO-551, con topografía ascendente desde este vial, y con un edificio de 433 metros cuadrados, compuesto por semisótano y planta baja, con una altura máxima de cornisa de 5,4 metros y fachada en piedra. La planta semisótano se destina a recepción, sala de actividades y local para usos múltiples. En la baja estaría el albergue (200 metros cuadrados), incluyendo comedor, cocina, sala polivalente, área de lavado, cuatro dormitorios y dos baños.

La pendiente de la parcela, del 40%, y su ubicación frente a la playa de A Borna, confiere a este terreno, según consta en el informe del IET una alta exposición visual cara a la ría de Vigo, y también desde la propia PO-551. La edificación se sitúa en la parte central de la parcela, a unos 16 metros sobre la cota de la carretera. Presenta una fachada orientada a la ría, de 26,80 metros cuadrados de longitud, y está semienterrada, de modo que su fachada, de 5,425 metros de altura, es la que presenta mayor dimensión. El informe reprocha que en la documentación técnica no no se definen los accesos a la edificación y que la alteración topográfica necesaria para la inserción del edificio solo aparece esquematizada. Considera que la resolución de los accesos puede implciar una alteración del estado actual del terreno muy superior al que produce la edificación.

El arquitecto técnico del departamento municipal de Urbanismo de Moaña también reitera la cualificación desfavorable al proyecto de este albergue juvenil, pero matiza que se tendrá en consideración que no se trata de denegar una licencia de obras, ya que no fue solicitada, sino de rematar la vía administrativa de la petición presentada en suelo rústico que, ante el informe vinculante del Instituto de Estudos do Territorio, cercena las posibilidades de continuar con la tramitación ante la consellería.