Desde la empresa armadora ya conocen el contenido del sumario y están "esperanzados" por una pronta solución. "La declaración del capitán fue bastante clara y quedó probado que en todo caso estamos hablando de un posible error, sin que existiese intencionalidad de entrar en aguas argentinas", apuntan fuentes cercanas a Pesqueras de Bon. Es por esa razón que esperan que de producirse una hipotética sanción se tenga en cuenta esa falta de intención como un atenuante. "Consideramos que no es lo mismo que si se hubiese adentrado intenciondamente y estamos colaborando plenamente con la Prefectura Naval Argentina", apuntan.

Los armadores están satisfechos del trato recibido por las autoridades y de la "celeridad" con la que se está instruyendo el expediente. "Tenemos el compromiso de que el lunes el sumario estará en la Secretaría General de Pesca en Buenos Aires. Lo único que lamentamos es que el martes es festivo en la capital", cuentan. Ello podría implicar una demora en la resolución y lo que quiere la empresa es volver cuanto antes al mar.

Desde la Prefectura Naval de Madryn reconocían ayer que "existe una buena predisposición" por ambas partes, por lo que confían en que el conflicto no se enquiste. Todo lo contrario de lo que ha sucedido con los tres buques chinos que Argentina retiene: dos en Comodoro Rivadavia y un tercero en la misma ciudad de Puerto Madryn. En este caso sus propietarios se han desentendido de los mismos y de las tripulaciones que los integraban.