La crisis socialista de Cangas continúa generando noticias. El ex secretario de Política Municipal, Eugenio González, confirmó ayer la convocatoria de una reunión de militantes en la sede. El lunes ya hubo una reunión de exmiembros de la dimisionaria junta directiva. En ella se habló de la crisis abierta por la dimisión de Martín Piñeiro como secretario xeral de la agrupación socialista de Cangas y portavoz del PSOE en la corporación municipal, y la de Toñi Queimaño, como edil. En la misma se valoró incluso la posibilidad de realizar un acto simbólico de entrega de de carnés del partido, responsabilizando siempre de la crisis a la concejala Maise Vilas, que se mantiene en el cargo, sin ninguna posibilidad de que presente su dimisión.

El hecho de que el secretario de Organización del PSdeG PSOE, Pablo García, anunciara que la prioridad es reorganizar el grupo municipal, que deja para más adelante reestructurar el partido, no sentó bien a un sector del socialismo cangués que quiere que sea la militancia quien se pronuncie en asamblea sobre las personas que deben relevar a Martín Piñeiro y Toñi Queimaño en la corporación municipal. De momento, María José Vilas ya anunció que no realizaría ningún movimiento de cara a entablar conversaciones con sus futuros compañeros en el grupo municipal. Por su parte, los adversarios de María José Vilas sí mantuvieron contacto con alguno de los posibles candidatos. Hubo contactos con Orlando Fernández, que es uno de los candidatos a tomar posesión de una de las dos actas que quedan vacantes en el banco socialista. Pablo García anunció que esta misma semana se iniciarían los contactos.

Un sector de la militancia se quejaba ayer de que no se les hubiese convocado a la asamblea oficiosa. Mostraba su malestar por haber sido excluidos y consideraba que esa fórmula no era la adecuada para "lavar la cara" ante la militancia a la que entiende que se le debe dar explicaciones. Ayer, militantes próximos a Martín Piñeiro recordaban que había solicitado en varias ocasiones al partido que mediara para poner fin al enfrentamiento que había con Maise Vilas, y no lo hizo.