La aplicación de la medida del copago para los usuarios de los comedores escolares pasa prácticamente desapercibida por la comarca de O Morrazo. La gran mayoría de los centros escolares están gestionados por las propias asociaciones de padres y madres de alumnos y sólo el colegio de Reibón, en Moaña, gestionado por la Consellería de Educación. A pesar de que la normativa no afectará al bolsillo de la mayoría de los progenitores, desde las Federaciones de ANPAS de la comarca aseguran que mantendrán reuniones durante las próximas semanas para matizar la normativa y decidir qué consecuencias podrían desprenderse de su aplicación.
No obstante, la presidenta de la Federación de ANPAS de Moaña, Carolina Costa, indica que en la actualidad la mayoría de los padres de Moaña afrontan menús que oscilan desde los 3 a 3,30 euros. "Los precios de los menús de los niños de Moaña que van a comedores escolares gestionados por las ANPAS tienen un coste muy superior al precio que tendrán que asimilar las familias que superen los tramos fijados por la Educación después de la aplicación de la medida", matiza.
Otro de los puntos destacados de la nueva medida es la intención de la Xunta de aumentar el número de usuarios de los comedores escolares asumiendo la gestión del 60% de los servicios de comidas escolares que, en la actualidad, están siendo gestionados por las asociaciones de padres y madres. "Este caso sí que habría que supervisarlo, ya que podría implicar que las personas con menos renta se beneficien de la medida porque obtendrían descuentos con respecto a la tasa actual, mientras que los padres que la superen tendrían que seguir pagando una cuota similar", especifica la presidenta de la Federación moañesa.
En la actualidad, la mayor parte de los padres de la comarca afrontan un pago de, aproximadamente, 60 euros mensuales por cada niño que acude al comedor escolar. Aseguran que es vital la ayuda de los Concellos y otras subvenciones de la Xunta para asumir el coste de este servicio, imprescindible para los progenitores que tratan de conciliar la vida laboral con la familiar.
A pesar de que durante este curso se registró un descenso en el número de usuarios de los comedores escolares como consecuencia de la crisis, los colectivos destacan la vital importancia de este servicio.