El comité científico que analiza la situación del caladero de Mauritania se reunirá "a finales de este mes o principios de abril", según anunció la conselleira do Medio Rural e do Mar, Rosa Quintana, que ayer se entrevistó en Marín con los representantes de la flota cefalopodera y los grupos políticos municipales. Quintana se mostró optimista respecto a esta reunión, argumentando que "ahora hay más posibilidades que en enero"; un extremo en el que coincidió el portavoz de CIG-Mar, Xabier Aboi.

La conselleira explicó que además de la reunión del comité científico, en lo que resta de marzo las partes también estarán pendientes de las decisiones que se adopten en las comisiones de Pesca, Desarrollo y Presupuestos, en la que "ya se votó a favor de que siga el protocolo". En este sentido Quintana lamentó que el PSOE apoyara la continuidad del protocolo en contra del criterio del PP, que defendía su paralización "mientras no se permita el acceso de las flotas europeas". La conselleira recordó que "se pagan 70 millones de euros para algo a lo que el sector no le está sacando provecho".

En la reunión del comité científico, Quintana confía en que se verifique la existencia de excedentes de cefalópodo, para que las flotas comunitarias puedan volver a faenar en Mauritania, el único caladero posible en este momento, apuntó. La conselleira explicó que se mantienen negociaciones con Marruecos, no así con Guinea-Bissau, a raíz del golpe de Estado que obligó a suspender las conversaciones.

Ayudas

Por otra parte, mientras que la conselleira ha asegurado que los afectados "están percibiendo las ayudas" -que se mantendrán hasta julio- y que el ministerio "ya hizo efectivo el segundo pago", el portavoz de CIG-Mar negó que se estén abonando dichas ayudas. Aboi afirmó que "a los marineros se les debe un mes" y que a los armadores se les adeudan pagos correspondientes a los meses de octubre y noviembre. Aboi demandó tanto la Xunta como al Gobierno central que le "den cariño" a las autoridades mauritanas; un "cariño" que "no significa millones" y que compensaría porque "cuesta más tener un centenar de trabajadores en el paro", argumenta Aboi. Podría ser "una planta de frío para su flota artesanal" o "alguna subvención para que vengan a estudiar Náutica a Vigo", propuso.