Tener una vida longeva es, para muchos, un sueño y para otros, una realidad. Pura Carrera celebró ayer su cien aniversario rodeada de sus familiares y amigos, que quisieron compartir con ella una fecha tan señalada. El humor y una dulce tarta no faltaron a la cita, donde la cumpleañera recordó algunos de los momentos más destacados de su extensa vida.

Si algo no cambió durante sus cien años de existencia es su pasión por el mundo de la moda. Durante sus años laborales, Pura Carrera trabajó en el sector comercial y siempre le encantó estar bien vestida y mostrar su mejor aspecto. La bisutería, la ropa y los zapatos son tres de las grandes aficiones de esta abuela "presumida", que todos los días se prepara con sumo cuidado para pasear con sus amigas. En este día tan destacado, su familia le regaló una chaqueta con pedrería que logró conquistarla. "Ella es una chica de ciudad, a la que le gustan los centros comerciales y disfrutar de un buen café rodeada de amigas", explica una de sus familiares.

Muchos de sus allegados le preguntan constantemente cuál es el secreto para lograr una vida tan extensa y en tan buenas condiciones y la viguesa asegura que tan solo basta con "ser feliz y cuidarse mucho". Es una apasionada de la buena gastronomía y le gusta comer bien, sobre todo si se trata de un pescado de la ría.

A pesar de ser una de las residentes más mayores en el centro Geriatros, en Aldán, Pura Carrera se conserva en un estado envidiable. Durante los fines de semana, acude a casa de una familiar, en Moaña, donde comparte dulces momentos con grandes y pequeños. Y es que los niños son otra de las grandes pasiones de la cumpleañera.