Un hombre de 64 años y vecino del centro urbano de Cangas fue trasladado ayer a un centro médico de Vigo para analizar las causas de un repentino comportamiento violento que se saldó con la muerte a patadas de su propio perro. Agentes de la Guardia Civil y técnicos en emergencias del 061 se trasladaron a media tarde a una vivienda de la calle Méndez Núñez, requeridos por vecinos que alertaron de la anormal reacción del hombre en los últimos días y que ayer desató su ira contra el perro.

Familiares del sexagenario -soltero y que vive solo- y miembros de los equipos de emergencias lo convencieron para ser trasladado en ambulancia a un centro de reconocimiento para analizar la causa de su extraño comportamiento. No ofreció resistencia.