El juzgado acaba de fallar a favor del Concello de Bueu en una reclamación interpuesta por la empresa Tribugest, que se encargaba de la gestión tributaria hasta el año 2006. La compañía le reclamaba al ayuntamiento un total de 31.000 euros, una solicitud que en su día los técnicos municipales rechazaron porque consideraban que esa factura estaba ya prescrita.
La empresa trabajó para el Concello de Bueu entre los años 2002 y 2006. Al finalizar ese periodo de cuatro años el gobierno local se vio obligado a convocar un nuevo concurso público para licitar el servicio de gestión tributaria, un proceso al que se presentaron Tribugest y Santiago Cucart, que acabó alzándose con el contrato. El concejal delegado de Facenda, José Inocente García Cuervo, explica que la legislación establece que después de cuatro años sin reclamar la cuantía adeudada se entiende que la factura queda prescrita. Los técnicos municipales entienden que es lo que ocurrió en este caso y así lo argumentó el Concello en sede judicial. Finalmente el juzgado le dio la razón al consistorio, aunque la sentencia no es firme y aún cabe recurso. Según el propio concejal de Facenda, el juzgado también declaró prescrita otra factura de un proveedor, aunque por una cuantía inferior a los 10.000 euros.
En la actualidad el servicio de gestión tributaria lo desempeña la empresa SCI, antes denominada Santiago Cucart. Precisamente en el mes de noviembre se decretó una prórroga en el servicio por un periodo de seis meses. Pero es la última que se puede decretar y pasado ese tiempo el ayuntamiento tiene que decidir si recupera el servicio o si bien convoca un nuevo concurso.
