Cangas emprende la lucha contra los vertederos incontrolados en los montes e inicia una campaña dirigida a comerciantes y hosteleros para incentivar la recogida selectiva que impida la acumulación de basura de todo tipo en los contenedores de materia orgánica.

La lucha para poner fin a los vertederos incontrolados se llevará a cabo la concellería de Medio Ambiente en colaboración con las comunidades de montes del municipio. Primero se localizarán los vertederos y después se procederá a su eliminación, con medios del Concello de Cangas y de la Mancomunidad de Municipios de O Morrazo. Primero se clasificarán los residuos antes de su eliminación, teniendo en cuenta que hay algún tipo de residuo que es tóxico, como puede ser material informático, televisores y algún componente del automóvil. La empresa que gestiona la basura de la Mancomunidad de O Morrazo trasladará a la planta de Sogama o al Punto Limpio los residuos de estos vertederos incontrolados en el montes.

La concejalía que dirige Jesús Graña señala que en estos momentos existen dos grandes vertederos incontrolados en los montes del municipio, uno en la carretera de Herbello, frente al depósito de agua y otro en la carretera de Coiro a San Cosme, debajo del viaducto de la vía rápida. El edil de Medio Ambiente advierte que habrá un programa de vigilancia, se instalarán carteles con la advertencia de tirar basura y también habrá sanciones. Las denuncias se canalizarán a través de Seprona y a aquellos que sorprendan arrojando basura en un vertedero incontrolado en el monte podrán ser sancionados con una multa de 600 euros. Este plan de eliminación de vertederos está previsto para comenzar mañana mismo y durará hasta diciembre.

Ya en el casco urbano, la intención de la concejalía de Medio Ambiente es acabar con la mala imagen que ofrece un lugar tan frecuentado por el turismo como la Praza da Estrela, detrás de la ex colegiata de Cangas. La intención es mantener los contenedores subterráneos para para los particulares y obligar al comercio y a la hostelería a utilizar las isletas de reciclaje que se instalarán en la calle San José y en la avenida de Galicia. A la hostelería de la zona se dotará de un pequeño contenedor para materia orgánico y otro para vidrio.

También advierte el edil de Medio Ambiente que queda totalmente prohibido arrojar basura fuera de los contenedores o verter en ellos restos de podas y restos vegetales. El entorno del colegio de San Roque y en la carretera del Espíritu Santo, son dos puntos negros en esta materia, como los contenedores sitos en la entrada del colegio Casa de la Virgen, donde se vierte todo tipo de material.