La entrevista mantenida esta semana entre la directiva de la asociación vecinal Santa Ifigenia, del barrio de Banda do Río, y los responsables de la Dirección Xeral de Patrimonio sirvió para que los vecinos dejasen constancia de sus reclamaciones, tanto de manera verbal como por escrito. El colectivo entregó una copia de las alegaciones presentadas a raíz de la incoación del expediente para incluir el astillero de Banda do Río dentro Inventario Xeral do Patrimonio Cultural de Galicia. En ese escrito aceptan el valor de las instalaciones, pero con muchas reticencias, y expresa en las alegaciones su "total y absoluta disconformidad con la catalogación de 450 metros cuadrados", recordando que existía un compromiso para que la rehabilitación no superase los 290.

Las alegaciones incluyen duras críticas hacia la dirección del Museo Massó y alusiones más o menos veladas a otros colectivos sociales implicados en la defensa de la antigua carpintería. La asociación Santa Ifigenia argumenta que si la catalogación llega a realizarse no debería incluir "más allá de lo que en la actualidad ocupa el antiguo taller, sin más grado de ocupación" ya que entienden que el resto del entorno carece del "mínimo valor digno de protección". Por ello reclaman una reducción con respecto a lo que se incluye en la resolución de Patrimonio.

Las alegaciones también achacan errores documentales en el expediente. "¿De dónde se sacó que el primer galpón ´foi levantado no ano 1907´ si hay personas vivas en le barrio que afirman recordar el primer día que se puso, siendo ellas adolescentes", dicen en el escrito. De igual modo critican que se afirme que "inicialmente todo o perímetro estaba pechado cunha cerca de madeira", cuando en realidad ese vallado se instaló en julio de 1996 y aportan recortes de prensa de la época.

La asociación vecinal Santa Ifigenia dedica un amplio espacio de sus alegaciones a poner en tela de juicio el valor patrimonial del "encumbrado astillero" y deja entrever que se están "mega valorando [sic] unos bienes en detrimento de otros de interés máximo objetivo, en clara y flagrante discriminación". "¿Por qué irracionalmente se deja en el olvido la cultura con mayúsculas, en su versión patrimonial, y se vuelcan esfuerzos en lo accesorio?", se preguntan en el escrito presentado ante la Dirección Xeral de Patrimonio. En el mismo no ocultan su abierta discrepancia con la dirección del Museo Massó y con Os Galos. "La asociación no está en contra de ningún activo sociocultural, de lo que sí está en contra es de la manipulación, de la exageración, de la coacción, del radicalismo y por supuesto está en total desacuerdo con quien desde la atalaya de un museo, en olvido del riquísimo patrimonio digno de mayor defensa, se aplique en exclusividad a un concreto bien [sic], en connivencia con una determinada asociación, manejando en su interés todos los resortes a su alcance".