Bangueses no dudó en señalar que además de querer provocar una sonrisa, el libro de Luis Davila tenía otra finalidad: la de hacer comarca, algo que los políticos no tenían, ni tienen ni tendrá vocación de hacer. Asegura el presidente de Fecimo que el libro está editado sin ningún afán de lucro y sí se mostró preocupado por la demanda que ya había antes de poner a la venta en las librerías. Se editaron 1.500 libros y el precio, encuadernado para regalo, se venderá a partir de hoy en 9,90 euros. No descartó Bangueses organizar una firma de libros con el autor, aunque ayer Luis Davila ya tuvo trabajo bastante de este tipo. A todos los que acudieron a la presentación les firmó y dedicó el libro. Está confeccionado por 200 viñetas ya publicada y recoge los temas más genéricos. Tiene varios apartados: del Mar, en el que las viñetas versan principalmente de O Morrazo, "Xente de Aquí", "Política " y otro titulado, "Un pouco de todo". Afirma el autor que son viñetas realizadas en los tres últimos años en las que trata de sacar hierro a la actualidad con el deseo de que el libro que ayer se presentaba sirviera para levantar el ánimo en época de bajón. De hecho, Luis Davila aborda en sus viñetas los distintos aspectos de la crísis económica y financiera. Apunta el periodista Salvador Rodríguez que el libro debería ir acompañado de un prospecto en el que se advirtiera de los efectos secundarios que podría producir al leerlo, entre ellos "risa floxa". "Un Luis inspirado

José Bangueses no descarta que sea esta la única colaboración entre Fecimo y Luis Davila. De hecho, el libro lleva en el lomo el número 1, algo intencionado por parte de Bangueses y una invitación al autor para que caiga en esta tentación.

Salvador Rodríguez otorga a Luis Davila otra identidad en el prólogo. Afirma que no es su verdadera identidad sino la que adoptó cuando salió de prisión de Sin Sin, despois de cumprir condena de seis anos acusado de furtivismo marisqueiro. A Louis City, auténticos nome e primer apelido do home que nos ocupa, atopáronno no Cabo de Udra as seis da mañá dun neoboento día de outono apalancando nécoras enanas".