Al tiempo que ayer se hizo público que el Sindicato de la Policía Local tenía denunciado al Concello de Cangas por impedir llevar armas a sus agentes, la concejala de Tráfico y Seguridade, María José Vilas, anunció ayer que trasladaría a la reunión de gobierno de martes su firme decisión de armas a dos patrullas de la Policía Local para colaborar en la lucha contra la violencia de género, tal y como se había acordado en la reunión de la Junta Local de Seguridade. También asegura María José Vilas que hay un retraso intencionado en dar salida a las bases para cubrir cuatro plazas vacantes que la junta de gobierno aprobó en el mes de mayo. Afirma que sí esa es su responsabilidad está dispuesta a aceptarla, y ya desde hace mucho tiempo. Por su parte, el Sindicato de la Policía Local coincide con María José Vilas en que hay una intención política premeditada de retrasar la publicación de las bases para cubrir las cuatro plazas de agentes y que este confrontamiento político lo que hace es deteriorar el servicio y poner en peligro vidas. No hay que olvidar que es un acuerdo de la Junta de Seguridad Local que la Policía Local, armada, colabore con la Guardia Civil en asuntos de violencia de género.

Por su parte, la alcaldesa Clara Millán afirma que nunca estuvo en contra de las armas, si bien recordó que para casos como el de violencia de género hay un protocolo de actuación que, como ayer, se cumplió sin riesgo para nadie. "Nunca puse en duda de que fuesen necesarias las armas, pero también estoy segura que hay actuaciónes en las que los policías están más en peligro". También asegura que las bases son responsabilidad de la concejala de área.