El mal estado de la cornisa de un edificio de la calle Montero Ríos, frente a la estación de autobuses de Cangas, obligó ayer a actuar a Protección Civil, que se desplazó a la zona alertada por los dueños de la vivienda, al constatar el serio riesgo de desprenderse sobre la calzada. Los operarios de emergencias comprobaron in situ el peligro y, acompañados por la Policía Local, vallaron el perímetro afectado, habitualmente muy transitado y pegado al paso de peatones que comunica con la estación marítima, de autobuses y la parada de taxis. Luego, procedieron a desprender la zona afectada, que hoy deberá ser revisada por los técnicos.

La llegada del invierno, con viento y lluvias como las de los últimos días, contribuyen al deterioro de terrazas y voladizos. Protección Civil contabiliza varios casos similares, especialmente en el caso antiguo y en casas deshabitadas sin un adecuado mantenimiento.