La inclusión de Bueu, Cangas y Moaña en la lista de municipios donde seguirá vetado construir a menos de 500 metros de la costa, según la orden que ha dejado lista la conselleira de Política Territorial en funciones, María José Caride, y que el nuevo gobierno del PP debería ratificar tiene “cousas boas e algunhas que non están xustificadas”, en opinión del concejal de Urbanismo cangués, Mariano Abalo, que es partidario de mayor flexibilidad en aquellos núcleos donde la construcción ya está consolidada y las nuevas licencias no modificarían sustancialmente el entorno. Sin embargo, cree que estas medidas deben servir de “elemento disuasorio para os especuladores” que se podrían aprovechar de cualquier laguna “para outros fins”, como levantar edificaciones sin respetar el entorno ambiental.

El responsable del urbanismo cangués conoce la medida que ha dejado Caride sobre la mesa, por la que se prorroga en 63 concellos gallegos -los tres morracenses entre ellos- el veto de construir cerca del litoral que finaliza el próximo 17 de mayo. No obstante, recuerda que los dirigentes gallegos son ahora otros, y que ratificar o no esa orden está en manos del nuevo gobierno que encabeza Núñez Feijóo. “Poderá mantela, levantala parcialmente ou suprimila”, sostiene Mariano Abalo, que no tiene claro por cuál de las opciones se decantará el PP.

Por su parte, el alcalde de Moaña, Xosé Manuel Millán, asegura que la propuesta realizada por Caride no es “concreta” y la considera “sólo eso”, una propuesta que el próximo gobierno puede seguir o no, por lo que prefiere no posicionarse. Sin embargo, el regidor local realiza un balance de las posibilidades y explica que para el municipio lo “verdadeiramente importante” es que el plan que marca las medidas de protección haga una diferenciación entre suelo urbano no consolidado y suelo urbanizable, pues, a su entender, las actuaciones en el primero se corresponden con remodelaciones para completar “a malla urbana”, y en el segundo caso se trataría de pura expansión urbanística.

Millán afirma que cuando la Consellería de Política Territorial estableció las medidas urgentes de protección del litoral no se tuvo en cuenta esa distinción, “e Moaña saíu perxudicada”. El alcalde se refiere a los terrenos de Sixalde, donde el Concello tiene la intención de construir el Centro de Salud y que, de no tenerse en cuenta ese concepto y manteniéndose la propuesta “sin concretar” de Caride, no podría llevarse a cabo. “É fundamental para nós, aínda que no seu momento a Dirección Xeral de Urbanismo non o considerase”. Explica que al margen de otras zonas que puedan estar afectadas por el veto de los 500 metros, la más importante es la de Sixalde, que podría solucionarse realizando esa “pequena” distinción de conceptos.

Por otra parte, el regidor moañés espera que el nuevo gobierno de la Xunta termine “dunha vez” la Lei de Protección do Litoral. Reconoce que “teñen todo o dereito a ter os seus propios criterios”, pero les exige que se posicionen “canto antes”, resuelvan esta situación de “incertidume” y se establezcan unas bases fijas. Según la propuesta de Caride en Moaña estarían afectados 179.998 metros cuadrados que Millán no puede situar.

Bueu pide un plan

En Bueu, el concejal de Urbanismo, Martín Villanueva, también reclama que se aceleren los trabajos para aprobar el Plan de Usos do Litoral, que debería permitir desbloquear las construcción en la franja costera del municipio, y afirma que la villa de Bueu no se caracteriza por construir de forma descontrolada, y que el suelo urbanizable se ubica en segunda línea, por lo que no es el “paradigma do que se quería combatir, senón todo o contrario”. Asegura que Bueu siempre se caracterizó por un urbanismo “responsable e ordenado, como se ven demostrando ao longo do tempo. Entiende que cuando se apruebe ese plan de usos del litoral la costa de Bueu debería quedar libre de todo bloqueo y permitirse el desarrollo de espacios ahora paralizados, como es el caso de varios sectores de As Lagoas.