La compañía Mar de Ons anunció ayer que a partir del próximo 1 de diciembre suspende todos los barcos de las líneas Moaña-Vigo y Vigo-Moaña que operan durante los fines de semana y en días festivos. Se trata de la primera medida que adopta la naviera tras el decreto que liberaliza el transporte marítimo en la Ría de Vigo. La empresa confirmó lo que ya era un secreto a voces con carteles en las estaciones marítimas, al tiempo que remitió una comunicación al Concello de Moaña. Los cambios también afectan a las frecuencias diarias: a partir de esa fecha el último barco saldrá de Vigo a las 22.20 horas, lo que supone adelantarlo 10 minutos con respecto al horario actual.

Las reacciones a la medida no se han hecho esperar. El alcalde de la localidad, Xosé Manuel Millán, adelantó que se pondrá en contacto con la Dirección Xeral de Transportes para que "adopte as medidas que están na súa man para impedir este atropelo". El regidor nacionalista expresó al mismo tiempo "a máis enérxica protesta do goberno local por unha decisión unilateral do operador", de quien aseguró que "parece empeñado en arruinar o servizo de transporte marítimo".

Paralelamente, el diputado Bieito Lobeira se entrevistó con la directora xeral de Transportes para interesarse por la situación del servicio y reclamar una solución a la problemática surgida tras el anuncio de la empresa. En el encuentro se abordó tanto la supresión de las frecuencias como la decisión de Zona Franca de no renovar la concesión de las taquillas que Mar de Ons posee en la estación marítima de Vigo, propiedad de la Autoridad Portuaria de la ciudad.

Desde la formación nacionalista indicaron que la responsable autonómica se comprometió a recibir a los alcaldes de Moaña y Cangas, Xosé Manuel Millán y Clara Millán; a la federación de asociaciones de vecinos A Chamusca de Moaña; y a una representación de los usuarios del servicio. La reunión será el próximo lunes a las 13.00 horas en la capital gallega.

Recogida de firmas

El aumento de la incertidumbre con respecto al futuro del servicio en la comarca motivó la creación de una plataforma de afectados que, en colaboración con A Chamusca, recogió ya más de 3.000 firmas para reclamar a los gobiernos locales de Moaña y_Cangas que apoyen sus reivindicaciones ante la Consellería de Política Territorial. Sus demandas pasan por que el departamento autonómico debe "garantir que a actual concesionaria manteña todos os servicios (días, horarios e rutas) ata a posta en marcha do novo sistema". Asimismo, solicitan "a retirada do actual decreto para incorporarlle garantías para os dereitos dos usuarios en materia de horarios, precios e rutas que deberan ser prestadas, con carácter mínimo, polas empresas que opten ao transporte de ría entre Vigo,_Cangas e Moaña".

Recuerdan que este transporte es utilizado por muchos vecinos de O Morrazo para "atender os nosos traballos e desprazarnos para asistencia sanitaria e outros servizos dos que, por desgraza, non dispoñemos na nosa comarca". Finalmente, aseguran que el reglamento autonómico "non regula, nin garante, nin concreta os servizos e as condicións mínimas que os cidadáns do Morrazo precisamos e temos que esixir das administracións".

Datos del año 2007 cifran el número de usuarios de la linea Vigo-Moaña entre los 6.000 y los 11.000 al mes. La ruta Moaña-Vigo la utilizan mensualmente entre 8.000 y 11.000 personas.

La decisión de Mar de Ons de suprimir los barcos de sábados, domingos y festivos en Moaña es consecuencia directa del proceso liberalizador iniciado recientemente por el Gobierno gallego a instancias de una sentencia de la Unión Europea. La naviera tenía una concesión por 20 años que le permitía ser la única compañía en prestar el servicio de transporte marítimo en la Ría de Vigo. Tras el decreto de la Xunta cualquier empresa podrá optar al mismo, por lo que Mar de Ons dejó entrever tras las reuniones con los responsables autonómicos que prescindiría de las líneas deficitarias.

Este periódico intentó ayer sin éxito ponerse en contacto con el responsable de Mar de Ons, José Nascimento, para conocer la opinión de la empresa.