José Ignacio P.G., de 59 años y vecino de Balea, en la parroquia de Darbo, sufrió ayer la rotura de la tibia y el peroné tras ser golpeado por una puerta de dos toneladas de peso del barco Playa de Menduíña II, que se encontraba atracado en el muelle de Frigoríficos del Morrazo y en el que estaba trabajando. El herido fue atendido en el mismo lugar del accidente por un médico del Centro de Saúde de Cangas y técnicos de transporte sanitario del 061, que lo trasladaron posteriormente a la clínica Povisa, de Vigo, donde fue intervenido quirúrgicamente.

El percance se produjo un cuarto de hora antes del mediodía y fue alertado a través del 112. De inmediato se trasladaron a la zona dotaciones de la Policía Local, Guardia Civil, Protección Civil y 061, algunos de cuyos miembros se encontraban reunidos en ese momento en la Xunta Local de Seguridade que se celebraba en el concello. Los servicios médicos constataron que el golpeo de una puerta le produjo la rotura de la tibia y el peroné a la altura del tobillo, así como una herida abierta, por lo que procedieron a inmovilizarlo y a bloquear la hemorragia, antes de evacuarlo al hospital vigués.

Las tareas de evacuación resultaron complicadas, ya que el Playa de Menduíña II estaba atracado en paralelo con otro buque, por el que hubo que acceder. Luego se echó mano de una grúa para salvar los obstáculos y depositar al herido en el muelle, desde donde fue trasladado en ambulancia. José Ignacio P.G. no perdió la consciencia en ningún momento, pero se quejaba del fuerte dolor producido por el impacto de la puerta y la rotura de ambos huesos.

Desvanecimientos

Por otra parte, el 061 acudió a Aldán y a la plaza de abastos para atender a dos personas que sufrían mareos, aunque se recuperaron al poco tiempo.