El gobierno bipartito de Moaña instó ayer a grupos políticos y colectivos sociales a "condenar" la actitud de los manifestantes anti-catastro. Tanto el alcalde Xosé Manuel Millán como el portavoz socialista Víctor Pastoriza criticaron con dureza la actitud de los manifestantes, tanto al impedir la celebración de la comisión de Cultura el miércoles como al abuchear a los miembros del ejecutivo y a funcionarios municipales durante la mañana de ayer, cuando siete miembros de la plataforma se encadenaron a las puertas del consistorio. Xosé Manuel Millán calificó la situación de "escandalosa" y les acusó de "secuestrar la libertad de expresión dentro del concello".
"Hay un sector de este colectivo que está adoptando actitudes de abierta provocación, ya no sólo con el gobierno municipal, sino de provocación y enfrentamiento con los periodistas, hoy con los funcionarios con amenazas a la Policía Local, y a colectivos sociales a los que están coaccionando", afirmó el alcalde. "Es escandaloso", añadió, al tiempo que insistió en que "no se puede permitir que un grupo, de forma coactiva lamine la libertad de expresión de los demás".
Para Millán, las discrepancias con el gobierno municipal "son legítimas y pueden estar más o menos enfocadas". Sin embargo se mostró contrario a que se limite el funcionamiento "democrático de un concello" y se implique "a personas que no tienen que ver en esta cuestión".
Por su parte, el teniente alcalde Víctor Pastoriza condenó ayer "enérgicamente" la actitud "de estas personas del PP, que son las que protagonizan estos actos que poco tienen que ver con la revisión catastral". A su juicio, se trata de "un atraco al funcionamiento democrático del Concello de Moaña". "Las elecciones pusieron a quien pusieron al frente del concello y no tienen porque soportar insultos y provocaciones, día a día, por parte de destacados militantes del PP", afirmó. Por este motivo, hizo un llamamiento a ese partido "que quiere ser alternativa de gobierno, para que ponga razón en este conflicto".
El portavoz del principal grupo de la oposición habló también ayer de la suspensión de la comisión de Cultura. Para José Fervenza, "los únicos culpables son los miembros del tripartito", dijo en referencia a los socios de gobierno y a InMo, fuera del ejecutivo pero contrario al movimiento anti-catastro. Entiende el líder del PP que los responsables municipales "se rieron y se cachondearon de los vecinos" al suspender días atrás las comisiones, decisión que, insistió, "trae ahora sus consecuencias".
El líder popular habló también de los motivos que llevaron a los vecinos a impedir que se celebrara la comisión de Cultura. "Se cabrearon porque según les dijo Libertad Cruz, la reunión iba a durar sólo cinco minutos, y por eso pretendían cobrar; piensan que sólo van a las comisiones por el dinero", explicó. Fervenza insistió en que "se suspenda de inmediato la revisión catastral, o esto va a traer problemas", auguró.
Las movilizaciones prosiguieron ayer. A las ocho de la mañana, siete miembros de la Plataforma anti-catastro se plantaban en la puerta del consistorio, pero su intento de entrar en el edificio fue atajado por la Policía Local. Se encadenaban así en el exterior, donde permanecerían hasta la una y media de la tarde haciendo ruido con pitos y cacerolas.
Los manifestantes, que estuvieron acompañados a lo largo de la mañana por algunos vecinos, portaban carteles en los que se podía leer "prisionero catastral" o "preso do catastrazo de Millán". En una pancarta rezaba "Moaña goberno de talibáns". "Mientras estén ellos vamos a seguir aquí semanas o meses hasta que nos den lo que pedimos", afirmaron.
