Blanco fue muy crítico con un comunicado del gobierno en el que agradecía a la presidenta de la Diputación provincial, Carmela Silva, la aprobación de una subvención para arreglar el auditorio municipal, cuando, dijo, esta obra simplemente es una más de las incluidas por el ejecutivo dentro del Plan Concellos de este año. Afirma que el compromiso real de la institución provincial con Lalín son los "cero euros" que llegaron en este mandato al margen de los obligatorios del Plan Concellos. Cuestionó los elogios a la Diputación, cuando, dijo, en tres años aportó a Silleda 6,3 millones (3,7 a mayores de los de los planes de los municipios de la provincia) y a la capital dezana solo se repercutieron 5,4. "Lalín a la Diputación no tiene nada que agradecerle y los lalinenses no vamos a pagarles las fotos de Carmela Silva", subrayó.

A juicio del portavoz, esta actitud casi sumisa con la Diputación contrasta con la beligerancia que hay contra la Xunta cuando se censura a la consellería de Cultura de Román Rodríguez, que en este mandato cerró inversiones por 2,4 millones y para este año hay otros 990.000 euros. Sobre la obra del auditorio dijo que el Concello tomó la orden de ayudas de la consellería para pedir fondos para equipamientos del auditorio y no para las obras, por eso se quedó fuera de las subvenciones en régimen de concurrencia competitiva. Aseguró que es práctica habitual del gobierno no citar a la Xunta cuando llegan ayudas como la de la semana pasada del Fondo de Compensación Ambiental o las anuales del Plan Marco, que, en este caso, proceden de fondos gestionados desde Agader.