El último tramo de la AG-53, desde Maside hasta su enlace con la A-52 en Barbantes, también marca un récord histórico en volumen de tráfico. Los 13.783 vehículos diarios registrados por la estación permanente situada en el kilómetro 85 de la vía autonómica elevan en 622 los constatados durante 2016, lo que conlleva un crecimiento relativo del 4,7%. Como en los demás trayectos de la autovía, el aumento es constante desde 2013, año cuya media diaria fue de 11.445 automóviles, para rebasar al siguiente los 12.000 y alcanzar los 12.641 en 2015. Una diferencia sustancial con los tramos anteriores es la menor incidencia del tráfico pesado, con 1.238 unidades en 2017, esto es, un 9% del tránsito total.

La variación mensual no es tan acusada como en los tres trayectos anteriores, puesto que agosto promedió 15.602 vehículos, que se traducen en un 13,2% más que la IMD anual, prácticamente el mismo porcentaje que se da por abajo en enero, con 12.066 unidades. Sí son más reseñables las diferencias entre laborables, con 14.473 vehículos por día, y festivos, con 12.401. Pero más amplia es aún la distancia entre la jornada más transitada, los viernes, con 16.364 coches -casi un 19% por encima de la media-, y la más tranquila, los sábados, con 12.215, es decir, un 11,4% por debajo. Hay una franja horaria, la que va desde las 19:00 hasta las 20:00, en la que el tráfico supera el millar (1.015).

El tránsito registrado en este último tramo de la autovía -es decir, en su llegada a Ourense- duplica con creces la media general de la AP-53 entre Santiago y Lalín, que en 2017 marcó un nuevo registro histórico, con 6.560 vehículos diarios. Su crecimiento se situó en el 4%, tras ganar 258 vehículos con respecto al año anterior.