La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que niños y adolescentes -de entre 5 y 17 años de edad- practiquen al menos 60 minutos diarios de actividad física moderada o intensa y que incluyan en estos hábitos saludables actividades que fortalezcan los músculos y huesos por lo menos tres veces a la semana. El consejo no parece haberse hecho hasta ahora un gran hueco en la agenda escolar. Alumnos de A Estrada sacarán mañana miércoles las clases de Educación Física a la calle para visibilizar la labor que se realiza en estas aulas y reclamar una hora más de esta asignatura a la semana, ya que en estos momentos solo cuenta con dos sesiones de 50 minutos cada una.

Desde el IES Manuel García Barros se explicó ayer que 60 alumnos de cuarto de la ESO participará en la actividad Educación Física na Rúa, una iniciativa que reúne a un elevado número de centros educativos de la comunidad gallega y que se difunde desde el Colexio Oficial de Licenciados en Educación Física e en Ciencias da Actividade Física e do Deporte de Galicia (Colef).

Los estudiantes se reunirán en la Praza da Constitución, al pie del consistorio estradense, a las 12.00 horas. En ese momento arrancará una sesión de Educación Física que se prolongará hasta las 14.00. Habrá tiempo para la práctica de distintas disciplinax deportivas, exhibiciones de danza o el desarrollo de juegos populares.

Otro de los objetivos principales de esta jornada es visibilizar que la Educación Física de hoy no tiene nada que ver con la de antes.

Así, el Día da Educación Física na Rúa, que en este 2018 alcanza su octava edición, busca poner el acento en la importancia de la Educación Física para el desarrollo integral e integrado de todas las edades, así como promover la difusión de actividades físicas saludables poco conocidas. Se indica que esta jornada, que se hace extensiva a toda España, da a conocer la nueva Educación Física, comprendida desde una perspectiva "integradora, variada y divertida, orientada a transmitir hábitos de vida saludables". De igual modo, al sacar estas aulas a la calle también se busca mostrar que la práctica de la actividad física ayuda a potenciar valores como el esfuerzo, la autosuperación, la cooperación o la empatía.

Los alumnos vivirán mañana una sesión diferente de esta asignatura y mostrarán a la sociedad estradense cómo se trabaja en estas aulas.