El Consello da Xunta aprobó ayer la actualización del Plan de Prevención e Defensa contra os Incendios Forestais de Galicia, Pladiga 2018, en el que se determinan los medios materiales y humanos disponibles para la lucha contra el fuego de cara a la época estival.

El documento incluye, un año más, el Distrito Forestal XVI, que afecta a las comarcas de Deza y Tabeirós-Montes (Cerdedo-Cotobade se reparte entre este distrito y el de Caldas-O Salnés), entre las Zonas de Alto Risco de Incendio. En estas zonas se desarrollan actividades más intensas de vigilancia y disuasión, para comprobar la evolución de los fuegos en parroquias donde en los últimos diez años se detectaron 30 fuegos de media anual entre el 15 de febrero y el 15 de abril, o 40 entre el 1 de julio y el 30 de septiembre. De igual modo, no se concederán en estas zonas autorizaciones extraordinarias para la práctica de pastoreo en los terrenos quemados.

A decir verdad, son solo cuatro los municipios de la provincia que no figura en la lista de ZAR: Cuntis, Moraña, Campo Lameiro y Ribadumia. Y, si hablamos de Parroquias con Alta Actividade Incendiaria (PAII), pasan de 73 a 77 en toda Galicia. En Pontevedra se contabilizan 15, repartidas en una docena de concellos. Dos de ellas afectan a la zona y son ya clásicas en este listado del Pladiga: ambas se localizan en el municipio de Dozón y son las parroquias de Santa María de Dozón y Santa María de Bidueiros. En los últimos cinco años, en la primera de ellas hubo 31 fuegos, que arrasaron 139,52 hectáreas, mientras que en la segunda en el mismo periodo se contabilizan 18 incendios y 125,34 hectáreas ardidas. El Pladiga de este año, en este sentido, prevé colocar 34 nuevas cámaras en parroquias de alta actividad incendiaria, y dispondrá de un helicóptero, también con cámara, para comprobar sobre plano la evolución de un fuego.

Durante el periodo de alto riesgo de incendios, la provincia dispondrá de 23 brigadas de tierra y dos helitransportadas, como personal laboral, a las que se suman otras 32 de contratación de empresa pública (28 de tierra) y de medios aéreos (4). Mediante convenios con los concellos y GES habrá 64 dispositivos más. En cuanto a los medios estatales, se contará con entre uno y tres helicópteros de vigilancia, que complementan los 5 de la Xunta. Los concellos y parques municipales y comarcales de la provincia aportarán 42 motobombas, mientras que los medios terrestres de que dispondrá el gobierno autonómico llegan a 46, entre motobombas cisternas y maquinaria pesada.

En cuanto al Distrito Forestal XVI, dispone de 38 puntos de acopio de agua aptos para helicópteros, y otros 141 idóneos para otros medios de extinción. Si en 206 se impartieron 31 charlas de formación a 2.754 alumnos, el año pasado la cifra cayó considerablemente en ambas cuestiones: 11 charlas para 626 asistentes.