Esta semana el gobierno anunció la petición a la Consellería de Medio Ambiente de que el proyecto de la planta de neumáticos fuese sometido a una evaluación ambiental ordinaria y no la simplificada con la que este departamento le dio el visto bueno a la factoría de Racso para Botos. Fuentes del departamento dirigido por Beatriz Mato explican que la resolución de la consellería se produjo el 27 de septiembre del año pasado, a la que se dio publicidad en el Diario Oficial de Galicia el 23 de octubre.

Pero además, Medio Ambiente subraya que al Concello de Lalín le fue requerido un informe el pasado 8 de junio de 2017, algo que le fue reiterado con fecha de 6 de septiembre del mismo año. Estas peticiones se enmarcaron dentro del trámite de evaluación ambiental simplificada, pero a día de hoy la consellería no tiene constancia de la recepción de dicho informe; es decir, el ayuntamiento no respondió a los requerimientos de la Xunta en el período de exposición pública. A la espera de la posición definitiva de la consellería, podría mantener su decisión de dar el visto bueno a la industria con la evaluación ambiental simplificada.